Tartas de boda pequeñas: mini obras de arte para endulzar el gran día
El deseo de personalizar su gran día lleva a muchas parejas a incluir tartas de boda pequeñas en su mágica jornada nupcial. Todo un placer para la vista y el paladar, perfecto para marcar la diferencia. ¡Descubridlo todo sobre estas mini delicias!
Desde que las ideas originales para bodas revolucionaron el panorama nupcial, la mayoría de parejas opta por prescindir de normas y protocolos y se decanta cada vez más por enlaces personalizados y diferentes. Entre las nuevas tendencias, por ejemplo, los banquetes se han convertido en celebraciones más informales en las que, a menudo, los invitados se sientan donde desean. Y, del mismo modo, el pastel nupcial se acompaña en muchos casos de tartas de boda pequeñas. Son en realidad mini réplicas pensadas para sorprender a todos los presentes. ¿Os apetece descubrir mucho más de estas dulces tentaciones, perfectas para llenar de originalidad y creatividad vuestro gran día?
¿Cómo son estas mini tartas?
Las tartas individuales son mini pasteles, de sabores, formas y coberturas ilimitadas. Una auténtica tentación ante la que es imposible resistirse, por lo que será una excelente elección en cualquiera de estos casos: en el postre, como pequeñas imitaciones de la tarta nupcial, entre las numerosas ideas para candy bar, si el día de la boda es el cumpleaños de algún invitado o, incluso, como uno más de los detalles de boda originales que marcan tendencia en 2022.
¿De qué sabores pueden ser?
Al igual que los pasteles de boda, las posibilidades de sabor de las tartas individuales son prácticamente ilimitadas. Así, pueden ser sencillas naked cake decoradas con flores de azúcar, delicados merengues de tamaño mini, tartas de frutas de temporada, fondant, versiones de chocolate, de limón, de zanahoria o de oreo, tartas de queso, red velvet, acompañarse de coberturas de vainilla, chocolate blanco... ¡No vais a saber por cuál decantaros!
¿Cómo servirlas?
Al principio ya os hemos comentado las diferentes posibilidades nupciales de estos pequeños dulces, pero ahora vamos a ver las distintas opciones una por una, para que podáis descubrir mejor en qué consisten y decidir por cuál de ellas os decantáis.
Como postre
Los postres del banquete son la guinda perfecta a un menú muy sabroso. Y, en este sentido, unas tartitas individuales harán las delicias de vuestros familiares y amigos. Además, podéis optar por servir las mismas a todos los invitados o bien por elegirlas de sabores y colores muy distintos para que las mesas se conviertan, por igual, en toda una explosión culinaria y cromática.
Asimismo, será una buena manera de adaptarse a las posibles alergias o intolerancias de alguno de los presentes, como celíacos, diabéticos o alérgicos a los frutos secos. ¿Puede haber mejor manera de sorprenderles?
Como réplica de la tarta nupcial
Una opción que marca tendencia hoy en día consiste en elegir una tarta de boda para cortarla como marca la tradición –sin duda, uno de los momentos más emocionantes del gran día–, así como pequeñas réplicas de la misma para repartir entre los invitados. Las ventajas de esta elección son muchas, pero una de las más importantes es que cada persona se siente especial ante su mini tarta, ya que tanto su presentación como su sabor son realmente inolvidables. Sin olvidar que, al no ser necesario cortar el pastel nupcial en muchos trozos para todos los presentes, se gana mucho tiempo.
Como parte del candy bar
Las tartas de boda pequeñas también harán las delicias de todos los presentes si las colocáis en la mesa de dulces, junto a cupcakes, macarons, galletas o variadas chucherías, por ejemplo. ¡Serán perfectas para reponer energías durante la larga fiesta nupcial! Ponedlas en platos de postre, en pequeñas bandejitas o en las clásicas tarteras de varios pisos y dejad que vuestros seres queridos se sirvan tantas como quieran.
Como idea para alguna celebración especial
Quizá el gran día alguno de los invitados esté de cumpleaños o sea una fecha muy especial para vosotros, ya que coincide con el día que os conocisteis o empezasteis a salir. Cualquier excusa será buena para servir una tarta de boda pequeña acompañada de una velita y de alguna de las magníficas canciones románticas para bodas. ¿Tenéis varias celebraciones? ¡Apostad por la diversidad! En cualquier caso, será un momento de lo más emotivo.
Como parte de los detalles de boda para los invitados
Estas pequeñas tartas de boda también pueden servir para dar forma a los regalos con los que esperáis sorprender a vuestros seres queridos. Una pequeña cajita transparente, acompañada de una bonita etiqueta con vuestros nombres o iniciales y la fecha del enlace, o bien con el logo del "sí, quiero", bastará para dar a estos dulces un toque muy personal que gustará por igual a todos los invitados.
Seguro que ahora que habéis descubierto todas las posibilidades de las tartas de boda pequeñas no queréis renunciar a ellas en uno de los días más felices de vuestra vida, ¿verdad? Pensad bien en el sabor o los sabores que más encajan con vosotros y en los colores que mejor armonizarán con el resto de los elementos decorativos del enlace y apostad por ellos. ¡Estos mini dulces marcarán la diferencia en vuestra gran cita nupcial!
