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Bodas

Ramos de papel para tus invitadas

¿Estáis pensando en regalar a vuestras invitadas unos ramos personalizados? No hay nada más personal que hacerlos vosotros mismos, así que tomad nota de este tutorial que nos trae nuestra novia Verónica Fernández.

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Esta semana os proponemos hacer un ramo personalizado, ya sea ambientado en el tema principal de vuestra boda o basado en la personalidad de la persona a la que esté dirigido. Además, os animamos a crear ramos variados de flores diversas y coloridas, una propuesta primaveral y llena de energía que os encantará.

Los materiales que necesitamos son:

  • Papeles varios: celofana, crespón, cartulina,etc.
  • Abalorios diversos
  • Elementos decorativos para personalizar el ramo, como por ejemplo: botones, ovillos de lana, bobinas de hilo, figuras de fieltro y cualquier otra cosa que se os ocurra y que pueda ser un símbolo de vuestra boda o de las aficiones de la persona a la que se dirige el ramo.
  • Una pistola de silicona
  • Alambre verde
  • Cinta de raso o cuerda de rafia
  • Tijeras

Vamos a empezar con las diferentes flores que podemos realizar. En este caso, las hojas que las acompañan son hojas artificiales que podéis encontrar en los bazares, pero si lo deseáis, podéis realizar las hojas con papel crespón, goma eva o cartulina. Eso sí, ante de realizar las flores es importante tener listos los enganches de alambre sobre los que las montaremos. Para ello cogemos una tira de alabre lo bastante larga como para poder oblarla por la mitad y que aún nos sirva de tallo. Lo enrollamos para que sea más fuerte dejando justo un hueco por la doblez. Ese hueco nos servirá para enganchar las flores.

 

 

Flor 1

Se trata de una rosa hecha con tiras de papel crespón. Simplemente debéis enrollar la tira de papel encolando con la silicona caliente al acabar. Si necesitáis que la rosa sea más llena y vistosa podéis enganchar otra tira a continuación de la primera y seguir enrollando hasta obtener el grosor que deseéis. Cuando ya la tengáis, ponéis silicona caliente en la base y engancháis el alambre en él. Para finalizar, podéis poner las hojas artificiales, igualmente con silicona adheridas al alambre.

 

 

Flor 2

Se trata de una margarita de papel crespón. Deberéis cortar varias plantillas como las de la imagen. Procurad que los pétalos os queden en el mismo sentido que la veta del papel. Cortad una medalla de crespón amarillo y pegadla a la base del alambre. A continuación, vamos enganchando las plantillas alrededor del alambre teniendo en cuenta que los pétalos deben alternarse para no dejar ningún hueco. Cuando lo tenemos todo dispuesto abrimos los pétalos hacia abajo. Para cubrir el tallo podemos usar crespón verde o fieltro cortado en zig-zag.

 

 

Utilizando este mismo sistema podéis crear flores de diferentes estilos. Únicamente, tenéis que recortar los pétalos con diferentes acabados: en punta y gruesos, largos y finos, redondeados y cortos, etc. Como podéis ver en estas imágenes los resultados son muy variados.

 

 

Flor 3

Se trata de una flor voluminosa y muy sencilla. El proceso es el mismo que para los pompones de seda, aunque en este caso usamos el crespón. Cogemos una tira bastante ancha de papel, la doblamos en acordeón y finalmente en dos partes sobre sí misma. Enrollamos el alambre a la parte media del acordeón y recortamos los dos lados en punta. Finalmente abrimos la flor alternando un grupo de pétalos hacia arriba con otro hacia abajo hasta conseguir el resultado deseado.

 

 

Flor 4

Cortad varios círculos de mayor a menor diámetro. Cuantos más círculos hagáis, más voluminosa se verá la flor. A continuación, doblad los círculos por la mitad en media luna y haced pequeños cortes a modo de flecos. Componed la flor pegando los pétalos de mayor a menor tamaño y pegad un abalorio en el centro para darle color y brillo. Finalmente, despeinad los flecos y enganx¡chad con silicona el cerco del alambre a la base de la flor. Rematad con hojas artificiales para darle volumen y consistencia.

 

 

Flor 5

Esta flor la haremos con cartulina. Cortad pétalos de dos tamaños distintos por un lado y por otro unas tiras finas en otro color. Enganchad las tiras al alambre cruzándolas entre sí. A continuación, realizad un pequeño corte en la base de cada pétalo. Debéis pegarlos alrededor del alambre, superponiéndolos entre sí (el corte en la base os ayudará a ello) de manera que se vea una flor llena. Por último podéis doblar un poco las puntas de los pétalos de manera que se van más naturales y el efecto sea el de mayor volumen. Para las hojas hemos usado cartulina cortada con tijeras zig-zag.

 

 

Composición del ramos

Cuando ya tenemos listas todas las flores para nuestro ramo las cogemos una a una según queramos combinarlas y vamos enrollando los tallos de alambre entre sí, formando poco a poco el ramo. No os preocupéis si las flores os quedan apretadas por la presión de los alambres, cuando esté terminado podremos abrirlo sin problema. Si el tallo del ramo ha quedado muy largo podéis doblarlo sobre sí mismo. Así tendréis un tallo mucho más firme y de mejor agarre. 

 


Para cubrir la base del ramo podéis usar papel crespón o celofán. En este caso, hemos usado un papel serigrafiado y de una textura y grosor similar al crespón, de color verde, combinado con otro de un color distinto. Hacéis un agujero en el centro de cada hoja, las insertamos en el tallo y anudamos con cuerda. Por último cubrimos todo el tallo con la cinta de raso o la rafia.

 

 

¡Y ya tenemos listo nuestro ramo! Ahora sólo nos queda darle el toque final añadiendo un abalorio como por ejemplo una mariposa, libélulas, mariquitas o un broche hecho de fieltro. Tanto si es para regalar como si no, será un ramo único, vuestro, especial y que durará toda la vida.

 

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