Ir al contenido principal
Bodas

Los 8 peores errores que puede cometer la madrina de boda

Si eres la madrina de la boda de tu hijo, hermano, amigo… ¡felicidades! Pero recuerda que debes cuidar muchos detalles y no solo la elección de tu look. Por eso te explicamos los errores que no puedes cometer para triunfar en un día tan importante.

No todos los días se casa un hijo, un hermano, un primo o un íntimo amigo. Es un gran momento para él pero también, lógicamente, para el resto de la familia. En tu papel de madrina deberás lucir espléndida, por lo que tendrás que visitar diferentes tiendas de vestidos de fiesta hasta dar con el modelo ideal. La oferta actual es muy diversa y podrás encontrar por igual modelos cortos y largos. ¡Sin olvidarte de los vestidos de madrina! Pero no es el único aspecto que debes cuidar, ya que no deberás dejar de lado ni el maquillaje ni los peinados para bodas. Para asegurarte el éxito en un día tan importante, evita cometer ninguno de estos errores.

1. Voy a destacar

Trata de no convertirte en la protagonista absoluta del gran día. ¡Ese es el papel de la pareja! Así que lo mejor es que elijas un estilo elegante en lo que a vestuario, maquillaje y peinado se refiere, olvidándote de brillos, de joyas excesivamente grandes, de un make up exagerado y de un recogido para 2020 muy estridente. Tus aliados: la discreción y la elegancia. La máxima "menos es más" siempre funciona. Y más en una fecha tan especial del calendario.

2. Elegiré un modelo vistoso

Para el look de la madrina se recomienda evitar las estridencias, apostando principalmente por un traje en tonos naturales (pasteles, tierra, nude, rosas….), como un vestido de fiesta azul de suave tonalidad, aunque podrás elegir libremente el tono del vestido y encontrarás por igual modelos rojos, fucsias, turquesa, verdes botella... Tradicionalmente la madrina es la primera que elige el vestido y después debe comunicárselo a la madre de la novia para no coincidir en color, por ejemplo, ni en un modelo muy similar. Tenlo en cuenta y organiza este tema con tiempo.

3. Llevaré un bolsito

Mejor que no. Para este tipo de ceremonias lo mejor es optar por un clutch discreto y sin muchos brillos. Es una apuesta segura y muy elegante que mejora tu imagen, pues llevar algo en la mano te aporta presencia y seguridad.

4. Me pondré mantilla con teja

Elige esta opción solo cuando te sientas cómoda con ella y sea fiel a tu estilo y personalidad. Es un elemento que siempre embellece a la madrina, pero se nota mucho si no estás acostumbrada a llevarla. Si es así, lo mejor es que te decantes por un tocado: son un acierto a cualquier hora del día. Y si no te acaba de convencer, no lleves nada.

5. ¿Vamos juntos a elegir tu traje?

Si tu hijo, hermano, primo o amigo te pide que le acompañes a elegir un elegante traje de novio 2020 para la boda, perfecto. Sino, es mejor que no trates de imponer tu presencia. Del mismo modo que, si finalmente te lo pide, deberás darle los consejos que consideres necesarios y, si algo no le queda bien, decírselo con cariño pero con franqueza. Pero no olvides que el que tiene la última palabra sobre su enlace, es él. ¿Le ha encantado un traje de novio original? Anímalo si le favorece y le sienta como un guante, aunque a ti no te acabe de convencer.

35mm fotógrafas

6. Voy a ser un manojo de nervios

Aunque será normal que estés algo nerviosa en una jornada tan mágica para todos, trata de mantener la calma y de mostrarte tranquila en la medida de lo posible. Piensa que tú eres uno de los mayores apoyos de tu hijo, familiar o amigo en los momentos previos a la ceremonia, cuando más tenso estará y más agradecerá unas palabras de calma, una caricia o un abrazo de complicidad. Del mismo modo, deberás estar lo más serena posible cuando lo acompañes sonriente y orgullosa hasta el altar.

7. Iré a escoger el vestido de novia

Si te hace ilusión acompañar a la protagonista de la jornada a escoger el vestido de novia Pronovias perfecto o acudir a alguna prueba del mismo, díselo. Pero recuerda que solo ella decide quien quiere que la acompañe.

8. No me voy a meter en los preparativos de la boda

Mal hecho. Aunque lo normal es que sea la pareja la que se encargue de todos los preparativos nupciales, no es menos cierto que necesita ayuda para muchas cosas. Así que seguro que agradecen que les eches una mano con diferentes tareas, como ir a recoger las invitaciones de boda vintage, revisar la lista de invitados o ultimar pequeños detalles de las ideas para el candy bar, por ejemplo.

Aunque seguro que ya sabías muchos de estos puntos, nunca está de más recordarlos. De este modo, solo tendrás que preocuparte de disfrutar al máximo de la jornada, como a la hora de saludar y conversar con todos los familiares y amigos que recibieron las invitaciones de boda y a la de darlo todo en la pista de baile al son de las mejores canciones de boda. ¡Qué nada estropee un día tan especial!