Mi experiencia en el restaurante Sa Canterella fue simplemente excepcional en todos los aspectos. Desde el primer contacto con Francisco, quedé impresionada por su amabilidad y profesionalidad. Su preocupación por asegurarse de que todo saliera bien fue evidente en cada detalle desde el inicio.

La calidad de la comida fue verdaderamente exquisita y abundante. Cada plato estaba muy elaborado, cuidadosamente preparados con ingredientes frescos y sabores exquisitos que deleitaron a todos los invitados.

Además, la meticulosa decoración de las mesas y las sillas elegantemente vestidas crearon un ambiente acogedor y sofisticado. La atención al detalle en la presentación de cada mesa era evidente, con una decoración floral autóctona, que agregaba un toque de elegancia a un día que no olvidaremos.

No puedo dejar de mencionar las exquisitas islas de embutidos y quesos dispuestas en la terraza, donde comenzó nuestro aperitivo. Un espacio original y precioso en el que los invitados pueden disfrutar de un aperitivo mientras escuchan música ambiental y disfrutan de unas vistas espectaculares.

Francisco lo hace todo de forma que el invitado no se tenga que preocupar nada más que de disfrutar. En nuestro caso también se encargó de llevar la tarta y de contactar con el pastelero para hacerle llegar nuestras preferencias.

Si estás buscando un sitio donde todavía la educación, el saber hacer, la calidad y la profesionalidad son sus señas de identidad, no te lo pienses. Todos nuestros invitados quedaron prendados de la atención recibida, la comida y por supuesto de las vistas espectaculares y privilegiadas del restaurante.

En resumen, Sa Canterella es mucho más que un simple restaurante; es un destino gastronómico donde la excelencia culinaria se combina con un servicio impecable y una atmósfera encantadora.

Sin duda, volveremos para disfrutar de otra memorable experiencia. ¡Altamente recomendado!

Todo lo que nos prepararon riquísimo, fueron muy amables y muy flexibles con nuestras peticiones. Recomendadisimos!