Después de todas las trabas que tuvimos con el momento en el que estábamos pasando por el Covid, el parador no se pudo portar mejor con nosotros. Tanto la directora, Virginia, como Soraya, una de las camareras que nos atendió, hicieron que nuestra boda fuera perfecta. Prepararon hasta el más mínimo detalle y nos ayudaron en todo lo que pudieron, incluso yendo muchas veces más allá de sus obligaciones. No se puede pedir nada más. La boda fue perfecta y en parte gracias a haber encontrado este sitio maravilloso y al personal que nos ayudó a celebrarlo.

El Parador de Olite es un antiguo castillo y como tal, muchas de sus paredes recuerdan a épocas pasadas y te hace sentir verdaderamente especial. Aunque en realidad todo lo que sucede dentro es para soñar, tienen una directora que es una bellísima persona. Virginia, nos acogió un día nublado en el que tuvimos dificultades con el Párroco de Olite y me dio un abrazo y se propuso a ayudarnos como fuese, eso creo que no tiene precio. Unas jefas de Comedor que me habría llevado a casa Geli y Soraya... Solo tengo palabras de cariño hacia estas personas, hicieron que todo fuera posible, prepararon todos los salones el día anterior para nosotros, nos trataron como verdaderos reyes y además dan la mejor comida de Navarra. Desde un marcó idílico añorando ser una de esas princesas medievales he vivido un cuento y creedme, desde aquella suite poco más me sentí como una princesa de verdad. Solo queda volver para rememorar el mejor día de mi vida. Gracias de corazón Virginia... A todos.

El lugar mágico y el trato espectacular. No tengo palabras malas para el día tan bonito que me hicieron pasar.

Celebramos el banquete y el baile en el Parador y fue todo perfecto. Rubén (jefe de comedor) hizo un trabajo impecable: estuvo pendiente de cada mínimo detalle con todos lo invitados y fue muy pro activo en cada momento para que los novios solo nos preocupásemos de disfrutar del día. La directora también estuvo muy pendiente de todo y la gente se fue encantada. La comida estuvo impresionante y el lugar no puede ser más idílico. ¡Os lo recomiendo sin ninguna duda!

Han pasado dos meses desde nuestra boda y todavía recordamos ese día como el mejor de nuestras vidas. Olite es un pueblo espectacular. Desde su Palacio Real hasta este Parador del s.XV, transporta a todo el que lo visita a la fantástica Edad Media. El personal muy atento desde el principio e intentando dar solución a todas nuestras dudas. Tenemos que dar las gracias especialmente a Virginia y Fátima, las encargadas de que todo saliese perfecto.
Desde la primera llamada, y a pesar del afán de perfeccionamiento que tenemos todos los novios, han sabido orientarnos y sacar el mejor partido a todas las estancias. Además, gracias a sus propuestas, pudimos dar un toque emotivo y cercano a nuestro enlace. En cuanto a la comida, debo decir que el deseo que teníamos de poner platos con cantidades buenas y caseros se cumplió con creces. Lo recomiendo a todas aquellas parejas que estén pensando en casarse.

Comida excelente, trato excelente, servicio increíble. Fueron muy atentos en todo momento. Los invitados estaban encantados por la atención de los camareros y nosotros con el jefe de sala y la directora. El cóctel de bienvenida lo hicimos en la parte trasera y el marco era impresionante porque teníamos la torre del castillo justo al lado. Muy recomendable para celebrar un evento aquí.

Estamos más que contentos de haber decidido celebrar el banquete en este fantástico sitio.
Desde el primer momento en que solicitamos información, han estado pendientes de nuestros deseos. No queríamos una boda con muchos invitados, y por lo tanto no nos encajaba un gran comedor con el típico menú de boda. Preguntamos sobre las alternativas que podían ofrecernos y fueron muy amables dándonos diferentes opciones, empezando por un salón muy íntimo para la celebración y siguiendo por diferentes menús.

La verdad es que más agradecidos no podemos estar, tuvieron el detalle de hacernos las minutas, invitarnos al cava y las copas. Y no solo estamos contentos por todo lo mencionado, sino que además el servicio estuvo muy atento y fue muy agradable, y, por supuesto, la comida buenísima. Elegimos un menú que llevaba mucha verdura preparada de una manera muy saludable y a la vez muy sabrosa, al igual que el pescado y la carne.
Sinceramente, no podíamos pedir más. Una calidad precio más que excelente.
Sin duda, recomendaré a todo el que me pregunte, que tenga en mente el Parador de Olite a la hora de elegir donde hacer el banquete. Incluso para celebrar cualquier otro tipo de comida o cena.
Solo puedo volver a dar las gracias por ayudar a que nuestro día fuese redondo.

Emplazamiento privilegiado, la comida riquísima y el servicio y la disposición de los empleados de 10. Gracias, sobre todo, a David que estaba ahí para todo, para cualquier duda o sugerencia que teníamos, él siempre estaba ahí, además de disponibilidad para poder quedar, ya que estábamos organizando la boda en la distancia. ¡Gracias por todo! Recomendable 100%.

Que decir del muy ilustre Parador de Olite. Todo fueron buenas sensaciones desde el minuto uno. Profesionalidad total. No dudamos en elegir este entorno, lugar y maravilloso palacio, y no nos equivocamos. Las instalaciones son espectaculares. Las vistas desde la terraza al aire libre, donde se realiza el cocktel, al castillo son preciosas. Desde nosotros los novios, nuestros padres, familiares y hasta nuestros amigos y conocidos, salieron de ahí con una maravillosa sensación, muy buen trato del personal, calidad de la comida....maravillosa y riquísima, todo estaba buenísimo y cada detalle que pedimos y solicitamos ahí lo tuvimos. Muchos de nuestros invitados se quedaron asombrados de la variedad y cantidad que había en el cocktel. Se amoldaron a cualquier cambio o sugerencia que les pudimos hacer y siempre trataron de solucionarnos y facilitarnos todas las cosas. Lo recomendamos 100%. Flexibilidad para modificar los menús planteados por David, jefe de comedor de gran calidad, atención, paciencia y esmero. Además de la flexibilidad para el planteamiento de las diferentes mesas, de la decoración de los salones, de las flores, del dj, fotógrafo. Todo fue un éxito en general, muchísimas gracias a todos los que hicisteis posible que nuestro día sería algo inolvidable, desde dirección, Virginia, Arantxa, Jose Antonio, que nos disteis toda vuestra atención y vuestras recomendaciones, pasando por el departamento de pisos, Luisa y todas sus chicas trabajaron al máximo para que nuestra habitación y las de nuestros invitados estarían perfectas, con todo detalle, Joselillo y Alberto, montaje y mantenimiento de 10, las chicas de recepción tan atentas como siempre. Por último, los jefes de comedor y de cocina, David y Rafa y como no de todos los camareros y cocineros, Lucía, Fernando, Manolo, Abel, Geli, MªCarmen, Vero, Teresa, Soraya, Rubén, Tomás, Dani, Esther, Jose,etc. que llevasteis acabo el banquete y que hicisteis posible que el día de nuestra boda, sea inolvidable para nosotros y para todos nuestros invitados, que no eran pocos. No se pueden hacer mejor las cosas. La amabilidad, profesionalidad y el cariño recibido son claves en este, vuestro trabajo.

Encantados con el trato y el lugar. La comida, el precio y las habitaciones, genial. El único inconveniente, que falta flexibilidad en la organización de mesas para números mayores de 110 personas, donde hay que partir a los asistentes. En otros aspectos, la flexibilidad es genial, me permitieron incluso hacer algunos experimentos de actividades para el cocktail y la comida.

Fue increíble todo. El servicio muy atento, la comida buenísima, no faltaba de nada y te ayudan en todo. David, el jefe de comedor, es todo un caballero. Yo se lo recomiendo a todos los novios por lo menos que vallan y lo vean que merece la pena porque es un sitio encantador. En definitiva yo no tengo mas que buenas palabras por que hicieron todo para que fuese un día inolvidable para todos. Mejor id y ver. David Jurado gracias por todo.

Un día perfecto, nos hizo buen tiempo y pudimos celebrar el cóctel de bienvenida en el patio. La comida muy buena, sobre todo el cochinillo y servicio rápido. Se nos hizo el día corto y nos quedamos con ganas de poder disfrutar más horas de baile. Nos regalaron la habitación de noche de bodas, ¡que más se puede pedir!

Celebramos nuestra boda en el Parador de Olite. Fue inmejorable el trato con todo el personal, la comida espectacular, y el sitio de ensueño. Muchos de nuestros invitados se alojaron allí y la experiencia fue perfecta. El cóctel en la terraza con las vistas al castillo encantó a todos los invitados. Nos preparamos en las habitaciones de allí y las fotos quedaron preciosas. No pudimos tomas una mejor decisión, recomendable 100%.

Celebramos la boda de mi hijo con una atención esmerada tanto en los detalles como en lo personal.Todo estuvo a la perfección además del exquisito almuerzo que disfrutamos en medio de un ambiente elegante y con una decoración hermosa. Rubén, nuestro metre, nos hizo sentir como en casa y no escatimó en atenciones. Gracias a su saber hacer y al de su equipo disfrutamos de una boda estupenda y entrañable. Volveremos en familia nuevamente para repetir momentos tan felices.

Lugar espectacular, con encanto. Comida riquísima y en abundancia, pero con servicio lento, se alargó mucho la comida y hubo falta de coordinación. Perdimos una hora de barra libre. Todas nuestras propuestas de cambio disparaban el precio. Por ello no cogimos ningún extra.