La boda de Sergio y Nuria en Meco, Madrid

El día de nuestra boda

Nos despertamos cada uno en casa de nuestros padres, no había nervios, había mucha emoción, un cúmulo de sentimientos preciosos. Nos vestimos en el mismo hotel, cada uno tenía su suite en plantas diferentes. Yo fui con mi madre y mi hermana, las tres nos pusimos nuestras batas y camisones. Enseguida llegaron los peluqueros y maquilladores. Pasamos un rato precioso juntas. El novio ya estaba vestido y salió a la iglesia. Yo ya casi lista estuvimos haciendo tiempo en el hotel, aquí empezaron un poco a aparecer los nervios. La llegada a la puerta de la iglesia fue el momento más bonito, andando del brazo de mi padre, mirando a todos nuestros amigos y familiares y ya por fin vi a Sergio en el altar junto a su madre, fue un momento precioso. La boda fue corta y el cura nos dijo unas palabras preciosas. Al salir ya todo fue diversión. La sesión de fotos, la entrada al cóctel, la comida… Nuestra boda de siempre sabíamos que iba a estar tematizada en África. Los meseros y seating plan eran animales, los centros de mesa eran flores de África, los manteles eran de elefantes, los detallitos fueron unos llaveros hechos por una ONG de Kenia, todo quedó elegante y precioso y, cómo no, nuestra luna de miel fue en Kenia. Durante la comida decidimos hacer varios juegos, entre ellos cada mesa tenía una canción y cuando sonaba se levantaban a bailar y los novios íbamos a esa mesa, fue divertidísimo y todos los invitados participaron. La barra libre iba acompañada con un fotomatón, recomendable 100% por los momentos divertidos que se viven y por el recuerdo tan bonito que te queda con el álbum firmado. También pusimos candy bar, pulseras luminosas y un Glitter Bar, que fue lo más exitoso de la noche. Toda la boda entera desde los jóvenes, abuelas, tíos, padres, amigos y amigas, todos terminamos maquillados con purpurima y brillos. La boda empezó a las 12 del mediodía y terminó a las 5 de la mañana. Disfrutamos al máximo, no nos lo pudimos pasar mejor, fuimos nosotros 100% en todo momento, los invitados nos han dicho que nunca han visto a unos novios tan felices, cómplices, siendo nosotros mismos, disfrutando tanto y contagiamdo nuestra alegría y energía.