La boda de Juanjo y Esther en Collado Villalba, Madrid
Rústicas Primavera Azul 7 profesionales
J&E
13 Mar, 2021El día de nuestra boda
Después de decidir casarnos hacía un año y medio (septiembre de 2019), pasar 3 olas de una pandemia, unos cuantos confinamientos, y muchos disgustos por el camino, llegó el gran día. Nunca nos planteamos aplazar nuestra boda y luchamos hasta el final para tener una boda segura para todos los asistentes y adaptada a todas las restricciones que en este momento había, pero no por ello menos especial.
Finalmente, de 150 invitados que éramos inicialmente, nos quedamos en 60 (debido a la situación epidemiológica nosotros decidimos disminuir ese número por responsabilidad, más los que luego fallaron por el camino). No habíamos pensado en una boda “así de familiar”, pero la verdad es que fue maravillosa. A día de hoy, la volvería a repetir sin ninguna duda. Con nuestros 60 invitados, realizamos una ceremonia “civil-legal” en el Cortijo que habíamos elegido, al aire libre.
Nos casó una concejala de nuestro municipio que, además, era la madre de una de mis mejores amigas (así que todo quedó muy en familia). Hablaron mi suegra y mi hermano, con dos discursos maravillosos en los que a todos se nos escapó una lágrima... Ceremonia sencilla con mucha emoción. Firmamos todas las actas y baño de arroz, con arroz que tintamos de colores y quedó precioso. ¡Todo el mundo fue muy respetuoso y nos felicitaron con los codos, como no podía ser de otra manera! Y nos sentimos igualmente acompañados y felices de todos ellos, porque estaban allí y estaban seguros, que era lo que más importaba.
Seguir leyendo »Los invitados comenzaron el cóctel y nosotros nos fuimos a hacer unas maravillosas fotos que tendremos un poquito más adelante (adjuntamos fotos hechas por invitados con sus teléfonos). La comida fue increíble. Todos nos felicitaron por ello y por el sitio elegido (Finca Cortijo El Gallinero). Fue un acierto absoluto. Hubo reparto de regalos a padres y hermanos. Hubo saludos por las mesas a los invitados (con nuestra mascarilla puesta). Hubo tirada de ramo. Hubo baile de recién casados. Hubo recena. Hubo libro de firmas. Hubo candy bar adaptado a la situación. Hubo barra libre que, aunque sentados en mesas porque lo que no hubo fue “discoteca”, la gente se lo pasó increíble, hablaron entre ellos, se conocieron unos a otros, creo que de allí salieron incluso nuevas amistades.
Nos reímos sin parar... ¡Disfrutamos! ¡Disfrutamos muchísimo! Creo que a veces pensamos que solo podemos disfrutar de una boda bailando (porque es lo que hemos conocido siempre y parece que lo diferente nos da miedo), pero a veces triunfa el amor que es lo que debe ser una boda, y las formas de celebrarlo pueden ser diversas. Hemos aprendido que otra forma de hacer las cosas no es peor, que sea diferente no implica que no pueda ser espectacular, y humildemente creo que lo fue. Quisimos luchar hasta el final por nuestra fecha y por nuestra boda y salió increíble.
La repetiríamos una y mil veces. Y dentro de muchos años podremos contar que nos casamos en mitad de una pandemia, en mitad de un estado de alarma y en mitad de un confinamiento... Que fuimos igualmente felices, y que triunfó el amor por encima de todo. Mi boda ha sido una boda “Covid”, segura, responsable, donde la gente ha disfrutado y nosotros con ellos. Mi enseñanza de todo esto, luchar siempre hasta el final, porque todo lo bueno, aunque se haga esperar, llega.
Fdo. Una mujer enfermera felizmente casada en tiempos de Covid.
Servicios y Profesionales de la Boda de Juanjo y Esther
Otras bodas en Fincas Grupo El Gallinero
Ver todas
Otras bodas en Madrid
Ver todas
Inspírate con estas bodas
Deja tu comentario