La boda de Jorge y Laura en Uruñuela, La Rioja

El día de nuestra boda

El día de nuestra boda lo recuerdo completamente nítido ya que sólo estuve nerviosa en el momento de los preparativos, porque como buena novia, iba tarde.

Algunos factores se pusieron en contra, como la maquilladora que tardó más de lo que tenía previsto, y los autobuses de los invitados que llegaron un poco tarde. Pero bueno, entiendo que en todas las bodas siempre hay algo que no sale como teníamos previsto. Aun así, el momento de vestirme en casa fue muy emotivo, ya que me cambié en mi casa del pueblo con mi abuela, mi tía, mis padres, mi hermano y mi cuñada. Puede parecer un poco caos con tantas personas, pero los necesitaba a cada uno de ellos allí.

Cuando bajé las escaleras para salir a la calle y vi el coche que nos llevaba a mi padre y a mí me emocioné mucho, ya que como nos lo había regalado un amigo, había sido un secreto como iba a ser hasta ese momento. La verdad, es que era realmente increíble.

La llegada con la música de fondo y ver a todos los invitados fue muy emocionante, mi padre me hizo sentirme muy segura y cómoda, así como ver a mi marido al final del pasillo esperándome. La ceremonia fue muy personal y participativa y creo que eso hizo que los invitados estuvieran más a gusto y atentos. Después de los abrazos y el arroz llegó el peor momento para mí que es el de sacarse las fotos. Al final, es un momento en el que tienes que estar parado y sonreír cuando en realidad quieres relajarte un poco de tanta tensión.