La boda de Felipe y Yenyffer en Vitoria-gasteiz, Álava

Nos recibieron los invitados y mi Felipe en la puerta de la Cripta, fue todo muy emotivo, me explotaba el corazón de ver lo guapo que estaba mi chico, esa mirada tan bonita, limpia y clara que tiene, han pasado casi 9 años juntos y esa mirada me sigue cautivando. Todo fue alegría.

Luego fui del brazo de mi padre hasta el altar, el padre Christian dio una misa preciosa (gracias, padre Christian, por las pruebas de la boda, es lo máximo). El momento más emotivo en la ceremonia, no sé, el momento de las alianzas, las arras, no sé, los votos, no sé, la verdad es que estaba por explotar de la dicha que sentía, tener a mi Felipe al lado en un día tan importante para ambos, estábamos muy emocionados, a mí la ceremonia se me hizo eterna, pero disfrutando. Maricarmen de La Rueca, mil gracias por el pañuelo, unas lágrimas de felicidad en la ceremonia de la boda fueron secadas con tu suave, bonito y delicado pañuelo.

Las chicas del coro Lûmina Taldea nos acompañaron con sus voces, fue precioso, nadie lo esperaba y gustó mucho a los invitados, seleccionamos con mucho mimo y cariño las canciones que queríamos para nuestra boda (Lûmina Taldea nos propuso/asesoró repertorio en cuanto al estilo de la música para el evento; mil gracias, chicas).

Javi estuvo en todo momento muy atento y activo, así como Susana, todo fue de maravilla.

Después de la ceremonia dentro de la Cripta, nos esperaba el Aurresku, muy bonito, pasamos por debajo de los arcos y espadas, fue muy bonito.

Los invitados fueron a tomar el cóctel al hotel, Felipe y yo nos quedamos para unas fotos.

Luego fuimos a dar una vuelta en el coche por Vitoria, mil gracias a Esther. Llegamos al hotel, compartimos saludos y risas con los invitados en la terraza del hotel (una terraza muy bonita para eventos, la atención del personal del hotel de 10), hizo un día de sol increíble, entre risas y felicitaciones, pasamos al banquete.

El banquete, muy bueno, ajustaron el menú con los cambios que pedimos (mil gracias, Irma y NH hotel Canciller de Ayala), compartimos entre risas unas palabras, tuvimos el gesto con nuestras madres de entregarles una réplica de mi ramo a cada una, y un detalle de flores para los testigos, todo de Goya (José, mil gracias, captaste perfectamente el estilo de la boda, una maravilla, romántico y elegante, todo en armonía, precioso).

Nos acompañó el DJ Ander, excelente, la fiesta fue divertida y amena.

Fue un gran día, y la continuación de nuestro camino juntos.

En nada nos vamos de luna de miel a Egipto, así que la historia continua.