La boda de Zandalee y Joaquín en Ponteceso, A Coruña

Todo el mundo se desplazó al pazo de Sergude y dio comienzo la celebración. Allí estaban presentes todas las personas importantes para nosotros, rodeados de un grupo musical increíble, con un aperitivo espectacular, una decoración de ensueño y un fotógrafo y videógrafos perfectos. Quedamos inmersos en una burbuja de disfrute máximo desde ese momento hasta que finalizó la boda. Se respiraba una energía maravillosa de amor, felicidad y diversión que era el reflejo de todo lo que estaba pasando.

Del aperitivo dimos paso al banquete, tras un paseo idílico de los invitados a través de un bosque encantado. Parecía que nada podía mejorar pero sí. Llegar al salón cargados de alegría y con la decoración con la que soñábamos mejorada y los invitados dando todo lo que tenían, fue maravilloso. A partir de ahí comenzó un ambiente de fiesta que no terminó hasta que finalizó la boda. Todo salió perfecto, hasta el final.

Solamente podemos dar las gracias a todos y cada uno de los invitados que hicieron el esfuerzo de estar ahí en nuestro día y a todos y cada uno de los proveedores por hacer ese día posible. No fue solamente una boda perfecta, fue la boda de nuestros sueños. Gracias por hacer de ese día, el día más feliz de nuestra vida.

Z&J