La boda de Sergi y Marta en Sant Vicenç De Montalt, Barcelona

Seguidamente al llegar a la carpa recogerían una bolsita con pompones de lana y pétalos de rosa, ya que la idea del arroz no nos gustaba "el arroz se tira como símbolo de fertilidad, y nosotros ya tenemos 4 hijos" ¡así preferimos cambiarlo!

Una vez estaban los invitados en la Carpa llegaron mis dos hijas, estaban preciosas, y de la mano y sonando de fondo “Going Home” de Mark Knopfer, entramos en la carpa.

Marta ya estaba esperando en el coche y de la mano de nuestros dos hijos caminó por el jardín e hicieron la entrada con el Canon en Re mayor de Pachelbel.

La ceremonia fue preciosa, sonaron la BSO del Señor de los anillos, el “Hallelujah” de Leonard Cohen y el “Marry you” de Bruno Mars.

Marta y yo nos fuimos a los jardines del Turó a hacernos las fotos, y los invitados después de recibir un cóctel buenísimo mientras esperaban el aperitivo se entretenían con un Photo Booth que habíamos montado con una cámara polaroid y un álbum para pegar las fotos, y con un árbol de huellas donde los invitados dejaban impresas sus huellas.

Durante el aperitivo sonaban canciones de películas en versión Bossa-nova, jazz o chill out, y todo el mundo recalcó la cantidad y calidad del aperitivo, ¡estaba todo buenísimo!

Una vez hechas las fotos con los invitados y una foto aérea que quería Marta de todos los invitados, éstos entraron en el salón Mediterrani y nosotros nos quedamos fuera con el Dj repasando la entrada de platos, tarta y demás.

Para la entrada en el salón habíamos escogido “Love is in the air”, entramos super contentos al ver todo el salón con nuestros invitados aplaudiendo y reflejando en sus caras que todo iba perfecto.

Una vez sentados en la mesa hizo entrada el primer plato al son del “Can Can” de la película Moulin Rouge, después el segundo con la canción “Thing” de la película Granujas a todo Ritmo, después los postres con la Canción de “Noa” de la película La Vida es Bella y por último la tarta nupcial con la BSO de Piratas del Caribe. Una vez cortamos la tarta cogí el micrófono y agradecimos a todo el mundo su asistencia y brindamos por todos. Durante la comida sonaron bandas sonoras de películas que le había llevado al Dj días antes en un Pendrive junto con toda la música de la ceremonia, aperitivo y demás.

Nosotros no repartimos detalles ya que éstos estaban en las mesas, para las mujeres habíamos previsto un marco de cine y una bolsa de tela plegada, y para los hombres una caja que contenía un pen drive tipo tarjeta con toda la música de la boda grabada.

Una vez estábamos comiendo la tarta y haciendo los cafés, se proyectó una película de 5 minutos de duración con los mejores momentos juntos desde que nos conocimos, y después hicimos la entrega de novios a unos amigos, de unos detalles a dos amigas embarazadas, y de un ramo y un marco con nuestra foto de recién casados a nuestros padres.

Y llegó la hora del baile, Marta se cambió de vestido y una vez se apagaron las luces empezó a sonar el “Time of my life” de la película Dirty Dancing. Los invitados no se lo creían y no paraban de gritar de emoción, hasta que levanté a Marta como en la conocidísima escena del baile final y todo el mundo nos rodeó gritando de emoción y moviéndose al compás de la música... ¡el baile había empezado!

Durante las tres horas de baile, pusimos un fotomatón donde los invitados se hacían fotos divertidísimas, les salían dos tiras de fotos, una la pegaban en un álbum y la otra se la quedaban. Fue un gran acierto ya que la gente se lo pasó genial.

Finalmente pasaron las 3 horas del baile… ¡volando!....y tuvimos que bailar la última canción con todos mientras sonaba, ¡amigos para siempre!

Y sin darnos cuenta ya estábamos solos en el hotel comentando que se nos había pasado todo rapidísimo y que ojalá pudiéramos volver al momento en el que entrabamos en la carpa acompañados de nuestros hijos. En fin, ¡esta es nuestra boda!