La boda de Rubén y Miriam en Lorca, Murcia

El día de nuestra boda

Empecé el día súper bien, súper tranquila. En la peluquería comenzaron los primeros nervios, ya que veía que se hacía la hora de salir y yo ahí seguía. Al llegar a casa, los fotógrafos ya estaban ahí, por lo que me puse aún más nerviosa. Comenzamos a vestirme y con las fotos y ya me iba calmando. Al salir de casa me encontré un coche súper chulo, regalo de los amigos. Y ahí comenzaban las sorpresas. Al llegar a la iglesia y ver a mi futuro marido parece que todos los nervios salieron y empecé a disfrutar de cada segundo, la ceremonia fue preciosa. Al salir, la banda de música donde siempre había tocado nos estaba esperando. Y en el restaurante, sorpresa tras sorpresa, todo inmejorable. Nuestros amigos nos hicieron un vídeo súper chulo y, nada, que volvería a repetir ese día una y mil veces.