La boda de Quique y Marian en Selva, Islas Baleares

El día de nuestra boda

El día de mi boda, para mí, fue sin duda el mejor de mi vida. Había pasado mucho tiempo organizando los detalles, buscando los proveedores, coordinando los tiempos, etc., ¡con los nervios que eso implica!

Pero la verdad es que el día de mi boda estaba muy tranquila, porque sabía que estaba en las mejores manos. El día antes de la boda organizamos un cóctel para recibir a los invitados que venían de fuera, en la terraza del Palma Cafe Galleri Marítimo, con vistas al mar. ¡Un cóctel informal y muy divertido!

Y ya, entrando en el día B, ¡os confieso que me levanté con migraña! Lo peor que había imaginado, así que me seguí durmiendo hasta la hora de ir a la peluquería. Fue llegar y empezar a peinarme y el dolor se había ido.

Después me fui al Hotel Sa Vinya d'es Convent a vestirme. Allí estaba mi madre y Vanesa, ¡mi wedding planner! Ella llevó a la perfección los tiempos de vestir, maquillar, fotos, y yo estaba tranquila (cosa que es muy rara en mí).

Después llegó Cesar con el coche y ya nos trasladamos a la Iglesia de Selva. Cuando vi la escalera cubierta con la alfombra roja que me había puesto por sorpresa mi padrino, ¡quería llorar de emoción!