La boda de Javi y Cova en Avilés, Asturias

Y el momento más bonito que recuerdo es llegar y ver la explanada de la iglesia resplandeciente del sol y llena de gente. pero no de mis invitados que estaban dentro ya, ¡sino de gente que se había acercado a ver la entrada! Estaba decorada preciosa, tanto la iglesia como el hotel lo decoró Alisma Floristas, y Mercé, ¡es otra auténtica crack! Confié en ella toda la decoración y lo dejó precioso todo, justo a mi gusto, blanco y rosa. Bueno, volviendo a la llegada a la iglesia, me emocioné sobre todo al ver a los niños de arras, estaban preciosos, ¡me los comía! Los vestidos los compré en una tienda de Madrid, Teresa y Leticia, tienen trajes preciosos para los niños y super bien de precio. ¡Y al entrar estaba muy nerviosa! Entré con la mano temblando y el ramo se movía sin parar. ahí no miré a nadie, sólo miraba para el altar donde estaba ahí de pie esperándome con una sonrisa de oreja a oreja el que iba a ser mi marido. Nada más llegar nos saludamos y nos besamos, él me dijo que estaba guapísima (¡qué me iba a decir! pero para mí era muy importante que le gustase). Y la ceremonia fue preciosa, pero sobre todo gracias al cura, Neyo, que hizo el sermón personalizado contando nuestra historia, mandó a la gente aplaudir cuando nos declaró marido y mujer, y hasta besarnos como en las películas (¡creí que eso no ocurría!).

¡Luego al salir de la iglesia nos encontramos con la sorpresa de que nuestros amigos habían decorado nuestro coche con post-its con nuestro nombre! ¡Muy original! Nos metimos en el coche y fuimos al hotel, ahí en la entrada ocurrió algo muy curioso, justo nos encontramos con unas amigas mías y nos paramos en la entrada a saludarlas. Pues bien, empezó a llegar la gente y entonces ya íbamos uno a uno saludándoles, y los invitados fueron haciendo cola a la entrada del cóctel. ¡No estaba para nada planificado, pero a la gente le encantó! ¡Y fue la forma de ver a prácticamente todos los invitados uno a uno! De hecho, el año que viene que se casan unos amigos dijeron que nos iban a copiar la idea yo… ¡Pero si no fue ninguna idea!

Luego nos hicimos las fotos en los jardines franceses que hay al lado del Ferrera, son espectaculares y con un día de sol, ¡qué más pedir! Salieron unas fotos preciosas y además no estuvimos mucho tiempo, unos 15-20 minutos así que nos dio tiempo de sobra de disfrutar del cóctel con la gente.

Los camareros super pendientes de nosotros de que comiéramos, y aprovechamos para hablar con la gente y hacernos fotos con ellos, ¡estuvo guay! Y luego la entrada al banquete estuvo genial, pusimos la canción “Mi gran noche de Rafael” así que un temazo, ¡la gente se vino arriba y nosotros también!

La comida espectacular, todo el mundo nos lo dijo, pusimos bogavante y solomillo. El maître, Santi, encantador y super profesional, fue increíble, absolutamente todos los invitados nos lo comentaron, que alucinaron con su profesionalidad, controlaba todo y no faltaba el más mínimo detalle a ninguna mesa. Además, a una mesa que no paraba de pedir sidra (llevaban 14 botellas así que imaginaros cómo estaban que no callaban) le dijimos a Santi que por favor no les diera más sidra y él nos dijo: “Si un cliente me pide algo no puedo decirle que no”, increíble, estamos super agradecidos tanto a Santi como a Sonia que se encarga de coordinar los eventos del hotel de lo bien que organizaron todo y lo contentos que quedaron los invitados.

Los muñecos de la tarta se los dimos de sorpresa a una pareja de amigos que se casan el año que viene, les emocionó mucho, ya que no lo esperaban. Y al terminar la comida teníamos más cosas preparadas: a nuestros padres les regalamos un marco con una foto nuestra, a nuestras madres un ramo de flores, al hermano de Javi también un marco con una foto de ellos de pequeños, a mi mejor amiga que me ayudó en todo momento con la boda, el ramo de novia y una bolita de esas de nieve con una foto nuestra y una dedicatoria, a otras dos amigas que están a un pasito del altar, una réplica del ramo a cada una.

Al terminar la comida mientras la gente bajaba al baile nos hicimos foto con la familia cercana con los jardines del NH de fondo, ¡que son una pasada! Luego al bajar al baile antes del baile nupcial yo tenía preparada una sorpresa para el novio… Había preparado un vídeo recopilando fotos suyas y mías de cuando éramos pequeños y luego de todo nuestro noviazgo, ¡fue un momento muy bonito y el novio se emocionó como no podía ser menos! Luego abrí el baile primero yo con mi padre, al menos en mi familia siempre se ha hecho así. Y al poco ya me cambia con mi marido. El baile la verdad es que no nos salió muy bien, no habíamos ensayado mucho y con el vestido tan largo pues fue complicado… ¡Y ya luego la fiesta! La gente se lo pasó súper bien y nosotros disfrutamos muchísimo. Pusimos candy bar, fotomatón, bailarinas para que la gente se cambiara que fueron un éxito. Y también chapas con frases graciosas. Nuestra boda puedo decir que resultó un éxito y fue un momento único e inolvidable, ¡me casaría 1 millón de veces más! ¡Espero que todas disfrutéis de vuestra boda lo mismo que disfrutamos nosotros!