Cuando llegué a Bride & Guest tenía una idea muy difusa del vestido que quería. Ninguno de los que había probado me hacía sentir cómoda, y temía acabar pareciendo disfrazada. Pero entonces apareció Raquel, y acertó a la primera con todo aquello que ni siquiera yo sabía que estaba buscando.

Desde el primer momento me escuchó con atención. Le expliqué mi idea, y con mucha delicadeza me fue conociendo: mis gustos, mi estilo, mi figura. Me enseñó varios diseños en papel para que pudiera imaginarme, pero ninguno terminaba de convencerme... hasta que llegó el primero que me mostró, que curiosamente fue también el primero que me probé.

Raquel estaba convencida de que ese vestido encajaba conmigo, y no se equivocó. En cuanto me lo puse, supe que era el vestido. Quienes han sentido esa certeza me entenderán. Jamás lo habría elegido por mi cuenta: yo buscaba cortes princesa que no me favorecían y que me hacían sentir como otra persona. Pero este era distinto: sencillo, con talle alto, mangas en globo y un delicado tejido en el pecho que le daba un toque romántico. Era muy yo.

Después probamos otros modelos, por supuesto —porque una se queda más tranquila cuando entiende por qué elige—, pero todos los comparaba con el primero. Incluso me animé a probar cortes que sabía que no me favorecían, solo para confirmarlo. En ningún momento Raquel me presionó; al contrario, me animó a visitar otras tiendas y tomarme el tiempo necesario. Esa honestidad me dio muchísima confianza.

Y así lo hice: visité otros lugares, pero en ninguno encontré la magia que sentí allí. Los vestidos me parecían todos iguales, y nadie supo captar mis gustos y mi figura como lo hizo Raquel.

Cuando terminé mis visitas, la llamé sin dudarlo. Mi vestido de cuento de hadas me estaba esperando.
Modificamos las mangas para poder bajarlas y retirarlas durante la boda (con corchetes invisibles y un par de hilos que cortamos cuando llegó la hora de bailar), y no hizo falta tocar nada más. En cada prueba me sentí tranquila, cuidada y feliz, algo que se agradece muchísimo en medio del torbellino que supone una boda.

Gracias de corazón por todo, Raquel y el equipo de Bride & Guest. Hicisteis que me sintiera la mejor versión de mí misma.💕

Raquel me escuchó en todo momento. Supo entender lo que quería, me hizo el vestido casi a medida, atenta a todos los detalles y súper amable conmigo y mi familia. Todo un acierto. La recomendaría siempre.

Dicen que cuando encuentras tu vestido de novia lo sientes, que tu mirada cambia y que tienes claro que es ese! Y asi fue en mi caso, después de días y de tiendas llegué de lo más cansada y sin muchas ganas a esta tienda, lo probé y supe que era mi vestido. El precio encajaba (que tenga zona de outlet para novias con presupuesto como el mio es ideal). Y aquel día salí de allí aliviada y contenta. Sin embargo, solo fue ese día. Los demás días salía agobiada y preguntandole a quien me acompañaba que me recordara por qué lo comprara allí? La respuesta era fácil, era mi vestido, pero la atención a la hora de arreglarlo dejó mucho que desear, todo eran opiniones no pedidas, intentar cambiar mi idea, y recalcar: "qué dirán los invitados? Aii mira qué corto se lo dejaron?" Sinceramente, para mi era mi día, y era yo, la que tenía que ir cómoda y segura, me daba bastante lo mismo, lo que opinase la gente, pero a ellas no. Hubo bastante juicio y opiniones no solicitadas (mira es que me pica le dije de una vez, a lo que me respondió "ai nena, y que esperabas? , pues esperaba comprensión, empatía y que quizás como es la primera vez que me visto de novia y que pruebo estos tejidos me lo comuniques cuando lo compro, que esos tejidos puedes dar esa sensación) durante todas las visitas y en la última ya lo probé por necesidad porque tenía claro que me lo iba a llevar estuviese como estuviese. Porque para mi gusto ya tuvieramos 1 cita de más. Les dije desde el principio como lo quería pero insistieron en no cortarle tanto por el que dirán...
Recomendación: cómprate el vestido alli, si lo sientes tuyo. Calidad precio increible. Pero arréglatelo por tu cuenta (porque además cuando sali de allí se lo llevé a otra costurera de confianza y la que arregló más de 5 vestidos de invitadas a mi boda, para ver si me podía "arreglar" algo, y me dijo que ni se atrevía a tocarlo, que no entendía como podían haberlo arreglado así. Los cortes del brazo no quedaron ni rectos...). Atención mucho que desear.

Repetiría sin duda. Un trato y asesoramiento de 10 por parte de Raquel y todo el equipo de Bride&Guest. 100% recomendable!

Despois de mirar moitos vestidos en diferentes tendas, non puiden facer mellor elección que comprar en Bride and Guest. Raquel atendeunos de maravilla desde o primeiro día, preocupándose, asesorándonos e pasándome info dos vestidos que me ían gustando. Finalmente acabamos mercando o vestido de noiva, nai da noiva, irmá da noiva, madriña, dama de honor… xa que ademais da boa atención, os vestidos son de moi boa calidade e hai moita variedade de diferentes deseñadores/as españois. Silvia, a modista, un 10, cunha paciencia e delicadeza infinitas (ao igual que Raquel) mellorou se cabe o meu vestido de noiva con detalles increíbles. Gracias!

La ayuda de Raquel fue imprescindible para elegir el vestido que estaba buscando. Una profesional de arriba a abajo, se implicó totalmente en mi vestido, y la verdad es que siento que acerté totalmente

Desde la primera cita a la que iba con miedos y muchas dudas Raquel supo asesorarme y ayudarme en todo. Te ofrece la posibilidad de modificar a tu gusto el vestido y eso es algo que en otros sitios a los que fui no hacian. Ha sido un gran acierto haber comprado mi vestido de novia ahí, además del precioso tocado que llevé que fue justo lo que queria y necesitaba! Estoy encantada con el resultado final, gracias por hacer un sueño realidad!

Un placer ponerme en sus manos desde la primera cita. Trato individualizado. Gran variedad y catálogo. Tiene en cuenta preferencias y corporalidad a la hora de aconsejar. Un rotundo acierto.

He comprado también el cancán personalizado, ya que los estándares me quedaban pequeños y la forma que le ha dado Ana, dada la espalda del vestido, un más 10. Lo mismo digo sobre el velo, que han sabido captar lo que yo quería poniendo solo una puntilla para la cola en forma semicircular.

Cuando ya pensaba que no encontraría un vestido de mi estilo, conocí a Raquel. Gracias a ella he podido conseguir un Yolancris que se adecuaba perfectamente a lo que estaba buscando. Además, Raquel me ha puesto todas las facilidades, pruebas necesarias, etc. Sin duda volvería a repetir.

Fue la primera tienda a la que fui y desde el primer momento supe que allí encontraría mi vestido de novia. Raquel es fantástica y en su tienda hay vestidos de todos los estilos, que en muchos casos se pueden modificar y adaptar a tus gustos, así como todos los complementos necesarios para estar perfecta en tu día. La recomiendo para novias y yo, sin duda, repetiré como invitada.

Sin duda alguna, una buena decisión. En la primera visita encontré el vestido que quería, aunque me enseñó distintos estilos de vestidos, yo lo tenía claro, tenía el que siempre había querido! En todo momento muy atentas, tanto la dueña como las modistas!

Genial, ¡excelente atención! Raquel es una gran profesional, ofreciéndote un trato cercano pero muy exclusivo. Gran oferta de vestidos y diferentes estilos a buen precio, tanto para novia como de invitada. La mayoría, diseñadores españoles.