Se nota que en Olagorta tratas con profesionales. La atención y el servicio fueron exquisitos. Se nota que Olagorta cuenta con cocina propia, recibimos un menú de una calidad muy elevada.

Todo el equipo de Olagorta son muy profesionales, miman hasta el mínimo detalle y hacen que no tengas que preocuparte por nada durante tu día porque ellos se encargan de todo. La comida exquisita, aún nos felicitan los invitados. En general, un lugar precioso, y te hacen sentir como si estuvieras en casa.

No podemos tener mejor calificación para Olagorta, creo que el excelente lo engloba todo. Un 10 de sitio, comida, equipo, organización. Lo tuvimos claro según lo visitamos, nos íbamos a casar allí sí o sí y fue la mejor decisión.

Lugar de ensueño. Nos casaríamos aquí una y mil veces. Imposible elegir mejor lugar para ese día tan especial. ¡Nuestro bosque encantado! Profesionalidad 100%. Excelente, magnífico, increíble y sobre todo para nosotros ¡Mágico! No tenemos palabras para describir el Caserío Olagorta. Mil gracias Eugenia y a todo tu equipo. Un placer. Un besazo enorme.

No tengo palabras suficientes para describir Olagorta. Es un caserío precioso ubicado en el monte, lleno de paz y tranquilidad y es justo lo que buscaba, lejos del tráfico y del mundo en general. Desde el primer momento sabía que quería casarme allí, había visto fotos de otras bodas y no había nada que no me gustase. El plan A es inmejorable, la ceremonia civil es en el jardín, debajo del magnolio y el plan B si llueve sigue siendo en el jardín, debajo de la carpa que tienen preparada, lo cual nos encantó porque habíamos visto otros sitios donde no tenían un plan B tan bien definido. El comedor es precioso, tiene una cristalera inmensa, lo que hace que siempre tenga claridad aunque llueva (como me pasó a mí). La comida está riquísima, la presentación está muy cuidada, la tarta es simplemente espectacular, la hacen ellos al momento independientemente de si hay 150, 200 o 350 invitados. Para Eugenia solo tengo palabras de agradecimiento por el trato, la cercanía y la facilidad en todo momento. No habría sido posible sin su ayuda. Cierto es que me ha quedado la cosa dentro de que a nosotros nos llovió y no pudimos aprovechar el jardín al 100%, así que ahora solo me queda convencer a alguien para que se casé allí.
Subo alguna foto del comedor y del día siguiente.

Eugenia nos organizó todo!es una máquina!su trabajo lo hace genial, coordina con el resto de gremios, y se encarga de esos pequeños detalles que nosotros por estar disfrutando del día no podíamos. Fue muy atenta y resolvió todas nuestras dudas rápidamente. Un diez.

La comida esta exquisita. Prepararon coktel, comida y recena. Todos los invitados insistieron en lo espectacular que estaba la comida, incluida la tarta que tiene muy buena fama. Muy atentos con todos los menús que tuvieron que adaptar para los invitados con necesidades especiales.

Es espectacular. Tiene un jardín precioso. Cuidan todos los detalles. ¡La comida es! Estarás en muy buenas manos con Eugenia. Lo recomiendo sin duda, es de los mejores sitios de la zona, si no el mejor, no lo dudes.

Elegimos este restaurante por las posibilidades que ofrecía para el número de invitados que manejábamos (150), puesto que permite que todas las mesas estén al mismo nivel. Aunque en la prueba de menú ya lo vimos, el día de la boda lo confirmamos: espectacular la comida, el servicio, los camareros y el trato. Eugenia resolvió todas las dudas que nos surgieron durante la preparación de la boda y demostró en todo momento gran profesionalidad con sus consejos. ¡Repetiríamos una y mil veces!

Recomendaría el restaurante por varias razones. El entorno es un lugar precioso, y las vistas también. El caserío es enorme y súper bonito, los espacios están super bien decorados y aprovechados, y la calidad de la comida es inmejorable.

Y por supuesto, es muy importante la exclusividad, pues solo celebran una boda por día. Otro cosa que nos convenció fue el tipo de banquete, que hoy en día lo hacen en mucho sitios, pero entones no era tan habitual: cóctel largo y comida sentados corta, por así decirlo.

Hemos celebrado nuestra Boda en Olagorta y nos hemos quedado flotando de contentos! El sitio es increíble , tienen un jardín que es como el paraíso, precioso para hacer la ceremonia y el cóctel. El banquete es en una cristalera que parece como si comieras fuera. La comida es fuera de serie, la tarta que ofrecen arrasa y el comedor simplemente precioso. Todos los invitados alucinaron, muchos dijeron que era la mejor boda a la que habían ido , y que les parecía estar en una boda como de película. Sin duda el sitio es realmente especial en todos los sentidos. Los responsables , Eugenia y Alvaro, son súper profesionales y muy amables, te facilitan las cosas todo lo que pueden. Recomendable 100%. Para nosotros no podríamos haber celebrado en un sitio mejor !

Nuestro día fue espectacular gracias a todo el personal del Olagorta, que brindó a todos los invitados una atención de primera y cuidó todos los detalles de nuestra boda. El equipo es más que profesional, la comida es deliciosa, y el entorno no puede ser más bonito y elegante. Tanto nosotros los novios como los invitados quedamos encantados. Nuestro día no podía haber sido más perfecto de principio a fin. Para nosotros, un diez de diez.

Nos casamos en julio de 2019 en Olagorta y repetiríamos 1000 veces más. Además de ser un sitio espectacular, el servicio es superprofesional, atento, cercano, y cuidan todo tipo de detalles. Teníamos invitados de distintos sitios (Sevilla, Madrid, Inglaterra), y todos quedaron alucinados con el caserío y su jardín, el trato recibido y la comida. Por último, destacar también el compromiso de Eugenia, que nos lo hizo todo superfácil, y acertó plenamente con sus recomendaciones, por las que, sin dudarlo, nos dejamos guiar.

Nos encantaba la idea de celebrar nuestra boda en un entorno que reflejase la cultura de nuestra querida Euskadi, tanto por sus preciosos paisajes, como por su deliciosa gastronomía. Eugenia Bengoechea, dueña de Olagorta, es una directora de orquesta excepcional que cuida cada detalle al máximo para disfrutar de una experiencia inolvidable. A día de hoy, muchos amigos y familiares, nos siguen recordando que fue una de las comidas más ricas que habían probado, y esa era una de nuestras máximas ilusiones. Yo por mi parte, ¡sigo soñando con la ensalada de bogavante y la tarta de Olagorta!

El caserío nos pareció precioso y el comedor, entre tanto verde, luminoso y con vistas nos gustó mucho.
Fuimos 100 adultos y 20 niños. Los niños comieron en el piso de arriba para tener sus tiempos, su espacio y sus entretenimientos contratados a parte. Estuvieron fenomenal.

La persona que nos atendió fue Eugenia, desde el principio encantadora y resolutiva. También nos recomendó fotógrafos, floristas, empresas para entretenimiento de los peques, DJs, de todo. Te lo hacen muy fácil y todo fueron excelentes recomendaciones.

La comida es estupenda y la tarta Olagorta un súper éxito, fresquita, sabrosa y original.
Son superflexibles con los menús, la decoración, horarios, organización...
No lo son tanto con la música. Queríamos un grupo de música para el cocktail que no nos permitieron, solo música ambiente (No recuerdo bien la razón) pero estuvo bien finalmente.
Nos hizo un día frío y malísimo, pero desde el principio tenían una carpa y un porche perfectamente protegidos, muy luminosos y con las estufas encendidas desde el primer momento.

En general todo salió muy bien, a pesar del día, son muy profesionales y el sitio es precioso y está muy cuidado.

La única pega es que la metre o responsable del comedor, fue en varias ocasiones, tanto con nosotros como con algunos invitados, maleducada y ofensiva. Quiero pensar que son cosas de los nervios y de que hacia el final algunos invitados llevan una copa de más y se ponen pelmas, igual a la mujer no le quedó otra que ser borde.

En cualquier caso recomendaría el Caserío Olagorta y a Eugenia siempre. Son un buen equipo y un lugar precioso.