La boda de Ramon y Gabriela en Maçanet De Cabrenys, Girona
Al aire libre Verano Amarillo 2 profesionales
R&G
25 Jun, 2016El día de nuestra boda
Cuando nos conocimos supimos que queríamos pasar el resto de nuestras vidas juntos. Pasado los años lo confirmamos y, justo un 25 de junio, decidíamos comenzar a vivir juntos y 6 años después, celebrábamos nuestra boda con nuestras familias y amigos (presentes o en el pensamiento). Aunque a 8.000 km estaba gran parte de mi familia los llevábamos en el corazón y fueron parte del mejor día de nuestras vidas.
A pesar de que las celebraciones suelen estar llenas de muchos preparativos, lágrimas, estrés y algún que otro olvido, nunca llegan a ser proporcionales a toda la felicidad, alegrías, risas y lágrimas que nos llegó a dar esta boda. Y para seguir en esa línea de felicidad decidimos pasarnos en grande el mejor día de nuestras vidas. Sin hacer caso a imprevistos ni a nada. O sea, nos pusimos en Modo “Boda Feliz Total”.
El día comenzó con besos y un desayuno para el novio que estaba un poco nervioso, ya que se guardaba un secreto que ni yo, ni la mayoría, sospechaba. Nos despedimos para prepararnos por separado, como manda la tradición.
Seguir leyendo »Mientras mi hermosa madrina (y hermana) me ayudaba a ponerme guapa, fueron llegando mi tía y mi primo para acompañarnos, mientras nos preparábamos pudimos llamar a los abuelos y a mi mami que, por cosa del destino y los dichosos kilómetros, impidieron que estuvieran con nosotros. Ellos, con todo su amor, han hecho de mí todo lo que soy y poder escucharlos justo en ese momento fue perfecto.
Luego de bendiciones y lágrimas, ya estaba lista con mi precioso vestido reluciente, me sentía como un reina, el coche nupcial abajo esperando para llevarnos a la boda, mientras se escuchaban los típicos: “Una foto aquí con tu tía, otra foto allá en el balcón” y en una de esas que escucho a mi madrina que dice: “Espera que se me rompió el vestido”. Fue un momento de no me lo creo… Yo, la novia, lista, preparada y a la espera de la madrina (ahora me parece gracioso) pero bueno, no sé cómo, en cuestión de segundos, ya estaba arreglado.
Entonces ahora sí… Al coche con los amigos y familia, realmente no estaba nerviosa estaba ansiosa por llegar, a verlo a decirle que sí, que quería pasar el resto de mi vida con él.
Pues llegó el momento, me bajé del coche con mi hermana del brazo y desde ese momento puse en mi cabecita el modo “grabando todo para siempre”. Tendría que decir que El Molí d´en Robert es un lugar precioso lleno de luz y árboles inmensos que siempre está hermoso, pues este día no fue diferente. Recorriendo el camino hacia el amor hecho persona, mi preciosidad, mi rey, mi todo, me despisté y no entré por donde tenía que entrar. Me dio igual, quería llegar rápido. Justo cuando estoy a su lado por fin y me siento que me doy cuenta que en la mesa había una cajita decorada, con unas ramitas de lavanda, preciosa que era un regalo de mi cuñada para nosotros, pues en ese momento caigo en cuenta que se me quedó el ramo en la nevera. Claro, de tantos nervios como no se me iba a quedar. Bueno, la verdad es que muchos no se habían dado ni cuenta.
Luego de darnos el Sí, muchos besos y abrazos, se van los nervios y llega la felicidad plena. A partir de aquí teníamos la sonrisa como pintada con tinta indeleble, no se nos quitó en todo el día. Luego todo fue diversión, risas y muchos abrazos, la verdad es que compartir un día así con amigos y familia es un gran regalo. Pero con el postre venía una sorpresa alucinante, tengo que contar que el novio (ahora mi esposo) tiene alma de músico, pues estuvo ensayando hacía meses, aprovechaba cuando yo no estaba, tenía todo escondido en el trastero y yo nunca de los nunca ni sospeché, ni me lo imaginé, la verdad sea dicha.
Tanto así que yo lo veía con la guitarra y aun no entendía que hacía, pensaba que cantaría otro y él tocaría como mucho. Fue el mejor regalo de la historia verlo cantar la canción "Je l'aime à mourir" de Francis Cabrel en catalán, porque adaptó la letra para mí. Fue precioso, no tengo que decir que las lágrimas saltaron sin previo aviso. Fue, sin duda, el día más hermoso de nuestras vidas, quedará grabado en nuestro corazón cada uno de los momentos maravillosos de todo el día.
Para terminar y no alargarme más, si alguien me lee porque se está preparando para su boda, solo os digo: “disfrutad cada momento, los buenos y los malos porque todos te enseñan algo. Graba en tu mente cada segundo de tu día, nadie lo recordara como tú. Y lo más importante, ese día sois vosotros dos, los protagonistas, ni los padrinos, ni los padres, ni los amigos, solo vosotros, lo único que les tiene que preocupar primero es que los novios estéis bien, a gusto, felices, luego los demás”.
Gracias a todos y en especial a vosotros bodas.net, que tenéis una app estupenda superintuitiva, alegre, práctica, con muchos consejos y ayudas. La verdad es que no necesité organizador de bodas, fuisteis una gran ayuda, no lo podéis imaginar. Muchas gracias por dejar que vuestro talento ayude a los demás. Un abrazo inmenso para todo el equipo.
Otros Proveedores
Otras bodas en Girona
Ver todas
Inspírate con estas bodas
Deja tu comentario