La boda de Paco y Rachel en O Porriño, Pontevedra

El día de nuestra boda

El día de la boda estaba muy nervioso, fue un día muy largo antes de empezar la ceremonia, madrugamos y como fue de tarde hubo que dejar los últimos preparativos listos para la boda. En la peluquería solo estuvieron 25 minutos conmigo, por la tanto aun me quedaba toda una tarde de espera para poder llegar al altar.

Por la tarde no pasado el tiempo, que si vuelta por aquí, por allá, revisar todo, alianzas, lazos, coches, etc. cuando llegó la hora de vestirme estaba tan nervioso que tardé casi una hora en terminar. A mí me llevó mi hermano en coche y de camino aun dimos un paseo por el pueblo, la llegada a la ceremonia, que fue en el mismo restaurante, fue esplendida, estaba ya todo el mundo a mi espera, todos me miraban y me ponían todavía más nervioso.

La espera de la novia fue lo peor, saludé a todo el mundo y todavía no había llegado. Una vez escuchamos el sonido del coche de la novia ya me fui directo al altar para recibir a mi mujer, entre la entrada y la música hasta se me escapó una lágrima por ver lo reluciente que estaba mi mujer. Fue maravilloso, estaba reluciente y superguapa.