La boda de Julio y Laura en Alcala De Guadaira, Sevilla

El día de nuestra boda

Llevábamos mucho tiempo esperando y cuando por fin llegó el día, todo salió perfecto.

La mañana fue muy atareada con los últimos preparativos, recoger el ramo, los adornos para las manetas de los coches, la sorpresa para nuestros padres... Comencé a arreglarme muy temprano y para mi sorpresa, estaba más tranquila de lo que esperaba. La sesión de fotos en casa pasó volando y todos estábamos relucientes de felicidad.

Al llegar a la iglesia empecé a ponerme nerviosa, ¡creo que hasta ese momento no fui consciente de que de verdad había llegado nuestro gran día! La ceremonia fue bonita y sencilla, y las fotos de exteriores pudimos hacerlas con calma, ya que teníamos bastante tiempo para ello, así que disfrutamos mucho de ese momento.

Y al final llegó la hora de celebrarlo con los nuestros. He de decir que el tiempo pasa volando y no te cunde para estar con todo el mundo tanto como te gustaría. Son tantas las felicitaciones, las palabras de cariño y las emociones que cuando te das cuenta ya va a empezar la barra libre y estás en la recta final de la celebración.