La boda de Jose Vicente y Elisa en Calatayud, Zaragoza

El día de nuestra boda

¡El mejor día de nuestra vida, sin lugar a dudas! Increíble la mezcla de sentimientos que se tiene ese día. No me desperté nerviosa, solo tenía ganas de que me viera con mi vestido precioso por fin, pero fue montarme en el coche y empezar a temblarme las piernas. Cuando llegué y vi a mi ya marido (todavía lo digo y flipo), estaba guapísimo y todo el mundo estaba superfeliz de estar celebrando este día con nosotros. La ceremonia fue preciosa, la comida tanto en el cóctel como en la cena estuvo brutal, ¡incluso mejor de lo que lo recordaba el día de la prueba! Y luego, la fiesta fue ya el cierre perfecto para un día perfecto. De verdad, no salió nada mal. Destaco la importancia de elegir buenos proveedores. Ahora, desde fuera, para las que estéis a puntito de casaros, os diría que dejéis los nervios fuera (o lo intentéis), que ese día todo sale, y si algo no sale como queríais, eso solo lo sabréis vosotros, ¡disfrutad a tope! Os dejo unas fotitos por aquí.