La boda de David y Laura en Bembibre, León

El día de nuestra boda

Como todo día de boda, empezó con mucho ajetreo, ya que además de la típica peluquería, maquillaje, vestimenta con reportaje incluido, tuvimos que ir al restaurante a ultimar la decoración, puesto que mucha de ella la habíamos hecho nosotros a mano, con temática de viajes.

Fue una ceremonia simbólica, ya que nos habíamos casado por lo civil en septiembre pero debido al Covid no habíamos hecho la celebración con familiares y amigos. Hicimos unos votos personales, la ceremonia de la rosa y algo simbólico que se me ocurrió a raíz de algo que leí, todo ello sin oficiante. Después subieron familiares y amigos a decirnos unas palabras y cantarnos algo. Los niños de la familia y nuestra mascota fueron los encargados de abrirnos y cerrarnos el paso hacia el altar.

Tras la ceremonia, dividí el ramo y se lo di a dos personas muy especiales en mi vida e hicimos la entrega de algunos regalos especiales. El cóctel fue el momento de las fotos y locuras preparadas por nuestros amigos. En la comida estuvimos solos en la mesa presidencial, disfrutando el uno del otro y haciendo bailar a los invitados cuando sonaba la canción de su mesa (soy una taza, el baile del gorila, los pajaritos...).