La boda de David y Laura en Zaragoza, Zaragoza

El día de nuestra boda

La celebración empezaba a las 19h, así que tenía toda la mañana para ir tranquilamente arreglándome. Llegó la hora y llena de nervios y emociones llegamos al hotel. Allí nos había preparado la ceremonia el marido de mi mejor amiga, que también es amigo mío. Fue preciosa, nos leyeron personas importantes para nosotros y lloré, lloré de emociones contenidas. Miraba a mi alrededor y estaban todas las personas más importantes de mi vida y la persona con la que he compartido mi vida durante más de once años.

Por fin habíamos dado el paso más importante en el que yo siempre había soñado. Tras la ceremonia empezó el cóctel y después la cena. Me prepararon bailes y tras la cena llegó el momento del baile nupcial en el que a la mitad entregué el ramo a una persona imprescindible en mi vida, mi tía que es como mi segunda madre y entregué el broche dedicado a mi madre que ya no está con nosotros a su hermana.

Tras estos emotivos momentos comenzó la fiesta... y aprovechamos el fotomatón que había contratado. Me lo pasé en grande y después de hablar con los invitados, ellos también disfrutaron. Se pasó todo en un abrir y cerrar de ojos pero fue inolvidable y cumplí uno de mis sueños.