COVID-19 Seguimos a tu lado en estos momentos. Consulta nuestro Centro de Ayuda.
En la playa Primavera Azul 3 profesionales
C&J
31 May, 2014El día de nuestra boda
Se despierta el día… Ya es 31 de mayo de 2014. Empezamos a creernos eso de que "vamos a casarnos". Se despierta un día precioso, la mar tranquila, el sol desperezándose. Me levanto muy tranquila. Más tranquila que la noche anterior, lo cual no deja de sorprenderme. Me preparo el desayuno y me coloco mi bata blanca. Una batita de raso preciosa, que era de mi madre de joven. Llegan la peluquera y la maquilladora. Mis niñas de Gidel. Con mucho mimo y cariño nos hablan para tranquilizar el ambiente, aunque mi corazón está muy calmado, ansioso porque que empiece el día y curioso por el qué me espera y cómo será todo. Empiezan preparando a mi madre y siguen con una de mis mejores amigas.
Llegan los fotógrafos. Camera Q2, con Tere que se queda conmigo y Alberto que se marcha a Puerto Sherry, donde se hospeda el que se convertiría más tarde en mi marido, James. Mi James, "¿estará nervioso?" me pregunto... Salgo al patio, que hoy lo veo más bonito que nunca, veo más color en todas las flores, respiro un aire hasta distinto diría yo... Miro al cielo y doy gracias a Dios por regalarme lo único que yo no podía controlar, que saliese el sol y parase el viento.
Seguir leyendo »Mientras Tere comienza a disparar su cámara a la vez que vamos charlando comienzan a arreglarme mis niñas Gidel, como me gusta llamarlas. Llega un gran amigo mío con mi ramo de flores. Es su regalo. Y es el ramo más precioso que jamás he visto. Y es para mí. Le doy un abrazo enorme con las lágrimas saltadas... Gracias Jacobo. A la hora de recogida del autobús todos los que están en la casa se marchan y nos dejan a mis estilistas, mi hermana y Tere solas en casa. Mi corazón va contando los minutos que pasan... Mi hermana me coloca el traje, me mira y me dice que soy la novia más bonita que jamás ha visto. Momentos que rompen el corazón. Llega el conductor y pasamos a recoger a mi padre. Está tan guapo mi papi...
Montadas en el coche, mi hermana, Tere, mi padre y yo vamos charlando de tonterías, no puedo creer que esté tan tranquila. Llegamos a Puerto Sherry. Todo está preparado, pero yo aún no lo he visto. Todos deben estar esperando que yo suba esa escalera y aparezca vestida de blanco. Uno de mis sobrinos ha debido pasar con una pizarra anunciando que "¡Ya viene la novia!". Subimos, yo como puedo, porque el traje me molesta un poco al andar (falta de práctica)
Mi sobrina de 4 añitos se niega a salir por el pasillo tirando las flores... intentamos convencerla en medio de los invitados, pero nada, la niña no quiere. No pasa nada... que siga la ceremonia. Entro con el canon de Pachelbel versión flamenca. Es en ese momento, en que llego a la alfombra cuando veo a James, veo su cara, veo cómo me sonríe... y me muero por darle un abrazo. Paso por el pasillo, veo gente, pero a la vez no veo a nadie. Sólo quiero llegar y sentarme, sinceramente. Cuando llego James me dice que estoy guapísima y le sonrío.
Comienza la ceremonia. Otra de mis mejores amigas, Ángela, comparte unas hermosas palabras que me hacen llorar sin parar. James no deja de apretarme la mano. Alabamos a Dios, amigos comparten palabra... Una ceremonia muy emotiva. Mi sobrino de 3 años entra con los anillos a la vez que suena la música sólo instrumental de If you let her go. Firmamos y nos abrazamos todos, testigos y novios. Ya estamos casados, ¡increíble!
Arroz, pétalos, brindis, fotos, besos, abrazos... Salimos a la sesión de fotos, con el entorno tan maravilloso que nos rodeaba, aprovechamos un barquito antiguo anclado en el puerto para entrar a hacernos fotos también. Volvemos al cóctel... delicias que parecen estar disfrutando todos los invitados, estamos contentos. Pasamos a saludar a los que nos da tiempo, con lo cual vamos comiendo poco, ¡al menos yo! Pasamos al almuerzo, la gente se sorprende por los meseritos que hemos preparado, pues son unas botellas muy originales con arena dentro y en el mensaje va el número de mesa. Todo muy vintage-marinero.
El almuerzo y el servicio una maravilla. Todo riquísimo. Traen la tarta, con los muñecos que nos había regalado uno de mis mejores amigos. ¡Qué maravilla! Queda preciosa y los muñecos geniales (luego nos los llevaríamos a la luna de miel para hacerles fotos en cada destino). Llegan los speeches, tradición inglesa por parte de James. Mi cuñado reparte fotos de James de pequeño mientras va dando el discurso, divertidísimo. James sale a decir unas palabras, para la novia ;) y de agradecimiento a los que nos ayudaron.
Yo salgo a regalar el ramo a alguien muy especial y que no lo esperaba... Mi mamá. Muy emocionada me abraza fuerte. James sale también a reconocer a su mamá, con otro ramo de flores que habíamos encargado. Repartimos los regalitos. Cadenitas de plata con un colgante de estrella de mar para ellas y mini navajitas suizas para ellos. Todos encantados. Chuches para los más peques. Aprovecho para seguir saludando a invitados y hacerme fotos con ellos. Cómo va pasando el día de rápido... Casi no puedo creer que ya estemos en este momento.
Volvemos a salir, ya llegando el atardecer, a hacernos más fotos, en un faro muy cercano al puerto. Mientras los invitados se quedan comiendo un helado servido por la mejor heladería de El Puerto de Santa María: Massimo. Los peques y los no tan peques, que no lo esperaban, encantados. Seguimos con más fotos y con alguna mini entrevista para un vídeo que nos quieren preparar los fotógrafos (¡y sin haberlo contratado! Son geniales).
Volvemos y damos paso al momento del baile. Entramos al salón y vemos que los niños ya están disfrutando, dando saltos en su castillo hinchable. Pasamos a la otra habitación, donde han preparado el salón para el baile y la barra libre. La decoración de mis wedding planners (Wonderful Day) inmejorable: Todo un cielo de paraguas londinense nos espera para acoger nuestro primer baile como marido y mujer.
Nos abrazamos. Suena From this moment, de Shania Twain, la canción que hemos elegido para el momento. Mi corazón empieza a latir muy fuerte. No puedo sentir más amor por la persona que tengo enfrente mía... el hombre de mi vida. Bailamos como si no hubiese nadie en el salón. Siempre temí este momento, pero ahora... Me da todo igual. Somos él y yo. Nos abrazamos, le canto, nos besamos... Pude ver en vídeos que me enviaron que la gente se emocionó con nosotros.
Y por fin dio comienzo la fiesta. A ritmo de rock y pachanga todos nos divertimos durante 5 horas de barra libre, con las fotos del photobooth marinero, con accesorios de piratas: barbas, pipas, sombreros, bigotes... Una fiesta divertidísima que, al no querer que se acabara, oí había seguido en un after... Durante la fiesta, James aprovecha para revelar el secreto de la luna de miel, la cual había preparado como sorpresa para mí. Un vídeo muy divertido a lo Indiana Jones revela que nos vamos a... ¡Tokyo, Islas Cook en Polinesia y Los Ángeles! Bien, bien, bien.
Mi hermana me anuncia que tiene una sorpresa para mí y proyectan un vídeo que nos había preparado, muy bonito, con fotos nuestras desde peques y de nuestros viajes. Momento que aprovecho para sacarla al escenario como tenía pensado y hacerle entrega de la liga, con la música de Ill be there for you de Friends o The Rembrandts. Me abraza y se me echa a llorar... momentos muy emotivos.
Un día inolvidable, corto pero muy intenso. A mí ya marido: gracias por ser cómo eres, por cómo me amas y repetirte que te amo. A los que hicieron posible este día: gracias y os queremos de corazón.
Servicios y Profesionales de la Boda de Clara y James
Otros Proveedores
Otras bodas en Puerto Sherry
Ver todas
Otras bodas en Cádiz
Ver todas
Cortijo de Frias
Castillo de San Marcos
Tres Mares Hotel
Inspírate con estas bodas
12 comentarios
Deja tu comentario