La boda de Àlex y Paula en Pedreguer, Alicante

El día de nuestra boda

Bueno, después de unas tres semanitas del día B y de la vuelta de la luna de miel, os cuento cómo fue ese maravilloso día en el que nos dijimos "sí" para siempre. Esa noche dormimos juntos en nuestra casa y por la mañana bien temprano cada uno empezó su marcha.

Empecé por la peluquería, tuve mucho dilema con el peinado, así que el día de antes me corté mi melena como siempre la suelo llevar y me puse un tocado de flores naturales igual que el ramo de novia, que era precioso y era muy yo, ¡así que cuando mis invitados me vieron alucinaron por la sorpresa del corte! Continué con la maquilladora, que acertó totalmente con el maquillaje.

Al salir de casa los amigos estaban esperándonos y nos tiraron una buena traca valenciana. A la 13:00 era la ceremonia, yo acudí con un coche de un primo mío y mi marido llegó con su moto, así que fue un puntazo. Cuando giré la esquina del restaurante y dirigiéndome hacia el altar, ahí estaba él, con su sonrisa perfecta y los ojos brillantes esperándome. La ceremonia fue preciosa, los amigos y familiares nos dedicaron unas palabras preciosas y luego empezó el cóctel.