La boda de Adrián y María en Huelva, Huelva

Pues bien, ya me disponía a salir de casa, me colocan bien el vestido y antes de bajar los escalones de mi casa escucho unos acordes de guitarra, "esta tarde se casa mi niña", por sorpresa de mi madre el grupo "Quitasueño Huelva" estaba plantado frente a mí, cantándonos a mi padre y a mí esa sevillana, que a él especialmente le encanta. Otra vez a aguantar las lágrimas, vaya nudo en la garganta tenía. Termina la sevillana y aparece un coche de los años 30 precioso, regalo de mis padres, con su chófer y todo eh, una verdadera maravilla, era precioso. Este coche me lleva hasta la iglesia y antes de bajarme veo a mi ya actual marido frente al altar ¡madre mía, qué sensación! estaba guapísimo, super elegante, siempre ha tenido mucha percha para los trajes, pero este le queda realmente genial.

Mi pequeño sobrino Manuel de 3 añitos va con un cartel de "ya viene la novia" a la vez que va anunciando mi llegada por el pasillo. Poco después lo sigue el sobrino de mi novio, de apenas año y medio, pegando saltos con las arras.

Me bajó del coche, me colocan bien la super cola que llevaba y el velo y comienzo a caminar del brazo de mi padre, al son del violín tocando "Marry me" una suite de Piratas del Caribe 3 (ya que toda mi boda giró en torno al cine). Por el pasillo miradas de complicidad y emoción de mis amigos...Llego y ahí está él esperándome, lo noto algo nervioso la verdad, mi padre me entrega a él y comienza la ceremonia, la cual estuvo amenizada por un trío de violín, piano y soprano (muchas de las piezas eran BSO).

Caminamos juntos hasta la salida de la iglesia, pedazo de nube de arroz y de pétalos que nos espera en la puerta. De repente, otro acorde de guitarra, un gran amigo nuestro comienza a cantarnos, esta vez se trata de un pasodoble de carnavales "Tú sabes cuánto te quiero", y antes de que acabe...sofocón, ya no puedo contener más tantas emociones, no solo lloro yo, casi todo el mundo llorando y emocionados...

Nos vamos a hacer las fotos y al poco nos incorporamos a la recepción para estar con los invitados. Comienza la comida y al cabo de una hora o así, de repente un "flashmob" delante de la mesa presidencial, nuestros hermanos y amigos nos lo habían preparado de sorpresa ¡estuvo super divertido!

La comida va transcurriendo con normalidad, hasta que llega el momento tarta, mi hermana hace repostería creativa y madre mía...veo venir una tarta de casi 1 metro por lo menos, con pisos de Nueva York y Hollywood, entre bengalas y sonando la canción "New York" (no lo he comentado pero es nuestra ciudad preferida), se convirtió en otro momento super emotivo, me abracé a mi hermana, ¡las dos llorando otra vez!

Después vinieron muchas más sorpresas, sorprendimos a nuestros invitados con una "edición en vivio", yo al novio con un diorama de playmobil de nuestra boda, llegó el baile nupcial, la barra libre y todo genial y con muchas anécdotas, pero no tendría espacio físico para poder contarlo todo aquí.

En resumen, acabaré como empecé, el mejor día de mi vida.

"María & Adrián"