La boda de Jack y Pilar en Collado Villalba, Madrid

Primero Los niños fueron tirando pétalos, luego mis 6 preciosas amigas y maravillosa hermana salieron de la mano con sus espectaculares brazaletes (Floristería Iglesias- servicio perfecto), y después fui yo, cogida del brazo de mi padre, porque igual sino me caía de la emoción, con mi vestido de outlet de Innovias (Madrid) y mi ramo de olivas de la Floristería Iglesias. Y empezó justo en ese momento, sonó mi canción (Legend- Ruskin gold), digo mía porque mi pareja es compositor y la escribió para mí. Y ahí estaba él, mi sol y la persona que más adoro y admiro en el mundo. Mi Jack, me estaba esperando con su kilt, más guapo que nunca y quién me dijo al oído: estás preciosa, lo cual causó unas cuantas lágrimas más.

La ceremonia fue bilingüe, un buen amigo de Jack fue traduciendo a inglés detrás del oficiante e hizo un trabajo impecable. Su voz, incluso para aquellos que no le entendían fue felicitada, transmitía calma y confianza. Intentamos hacer la ceremonia breve para que no resultase muy larga. Nuestros familiares hablaron, y nos sacaron los colores, como suele ocurrir. Terminamos con la representación del Canon por un equipo fantástico de músicos: una viola, un chello y una guitarra. No podía haber sido más especial.

Durante el cóctel bebimos e hicimos muchas fotos con nuestros maravillosos fotógrafos Alvaro y Silvia (Zimaphoto), y al ir a entrar al banquete, nos sorprendieron los invitados con un flashmob de la canción Because I'm happy. ¡Fue espectacular! Durante el banquete 3 buenos amigos nos dedicaron unas palabras. Fue muy emotivo y derrochaban amor y alegría. Repartimos regalos a los invitados durante el café y jugamos a un juego para promover la interacción entre los dos países y culturas.

A continuación empezó la barra libre y para celebrarlo, un amigo de Jack preparó unas ceilidh o bailes escoceses. Fue divertidísimo ver a todos los españoles perdidos e inventándose los pasos. Fue una noche muy especial para nosotros, tardamos unos días en bajar de las nubes donde estábamos gracias a todo el amor y cariño recibido por nuestros invitados. Además, tuvimos la increíble suerte de que no llovió e hizo una temperatura perfecta. Ahora ya estamos preparados para todo lo que esté por venir, juntos.