La boda de David y Rocío en Pedralba, Valencia
Elegantes Verano Rojo
El 12/09/2015 234 3 2
D&R
12 Sep, 2015
El día de nuestra boda
Después de tantos preparativos y parecer que no llegaba, llegó mi día. La verdad es que estuve más nerviosa los días previos que el día del enlace. Con los preparativos, en esa semana, ya me sentía un poco agobiada y por un lado quería que pasara ya el día, pero por otro quería disfrutarlo a tope.
Llegó el día. Madrugué, pero había dormido medianamente bien, fui a la peluquería y estaba muy nerviosa. Enseguida llegó el fotógrafo, mi madre estaba tan nerviosa que parecía que no se enteraba de nada. Empezaron a llegar familiares y amigos a mi casa y, enseguida, mi novio y sus invitados.
Nos dirigimos a la iglesia, la cual fue una ceremonia muy emotiva y con un coro rociero. El cura hizo una ceremonia amena y no se extendió demasiado. Luego, todo el mundo me comentó lo que les había gustado el coro. Era un sorpresa que solo sabíamos nosotros dos.
Para el momento del arroz había preparado bolsitas, pero los amigos de mi marido ya traían más. Luego, llevaba arroz por todos sitios. También hubo la clásica lluvia de pétalos y una traca. Fue genial esa salida. Todo el mundo nos felicitó y estuvimos un buen rato dándonos besos y abrazos.
Seguir leyendo »A la hora del coctel y, después de hacernos unas fotos en los jardines del salón, llegaron los invitados y empezaron con el cóctel y los cortadores de jamones. La comida estaba muy rica.
Los invitados entraron al salón y después entramos nosotros, al ritmo de la canción: "Entre dos aguas", de Paco de Lucia (que nos encanta). Brindamos y empezó la comida. Fue todo genial, la verdad.
Hubo varias sorpresas, también, porque ese día celebraban su cumpleaños dos amigos del enlace. Así que pusimos la canción del cumpleaños feliz y fuimos hacia su mesa con unos regalos. La verdad es que no se lo esperaban.
Cuando di el ramo a mi cuñada para que se lo diera a mi suegra (que falleció el año pasado), sonó la canción de: " Mediterráneo ", de Serrat.
Después, la tarda nupcial fue súper chula, con una fuente que caía agua, y unas luces muy originales. Los padrinos empezaron a dar los detalles. También, los amigos, fueron muy originales para darnos los regalos, Una caja llena de recortes de periódicos y dinero mezclado y, al fondo, un tronco. Mis amigas me regalaron un cofre con monedas de un euro (que nos tocó contar al día siguiente).
A la hora de la barra libre hubo Photocall, Candy bar y, también, puse un libro de firmas para recuerdo y unos abanicos de recuerdos.
El baile estuvo muy bien; bailamos la canción de Bryan Adams, y luego empezó la barra libre, y la gente estaba súper animada. Todo el mundo nos dio la enhorabuena y nosotros estábamos encantados.
El día termino en un hotel obsequio del restaurante para pasar la noche de bodas.
Aún estoy en una nube, ¡un día inolvidable!
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