Desde el minuto uno que entramos en esta finca nos enamoramos de cada rincón de ella. Fuimos a visitarla en enero, nuestra boda sería en verano, y aun así tenía un encanto especial. Almudena es la mejor persona que nos pudimos encontrar, atenta y dispuesta a todo. Flexibilidad y ayuda cada vez que lo necesitamos. Tuvimos que aplazar la boda, por el Covid, y sin ningún problema buscamos otra fecha. Sin duda, es la finca más bonita que podéis elegir, todos los invitados alucinaron al entrar. Si tuviera un reloj y pudiera echar el tiempo atrás, volviendo a disfrutar del día más importante de nuestras vidas... Volvería a elegir la Antigua Fábrica de Harinas con los ojos cerrados.

Volvería a elegir la Antigua Fábrica para casarme sin duda. Cuando ves las fotos ya es muy bonito pero la realidad le da mil vueltas. Llegas y ves la magia del sito, es mágico, de cuento de hadas. Cada rincón es espectacular. No le haría falta ni decoración x el entorno lleno de flores, árboles, el río con el puente, el color del edificio… Y si a todo esto le añades a Almudena, la dueña que es todo amor, que le encanta lo que hace y te lo pone todo fácil y Javier, su hermano que lleva la música de todo el evento, haciendo que sea una boda de película, no se puede pedir más! Y la casita donde pasan la noche los recién casados, de revista de decoración!!!! No me casaría en otro sitio.

Gracias,gracias,gracias Almudena y a todo el equipo de la Antigua Fábrica de Harinas, sois increíbles , no podíamos haber elegido un sitio mejor.

Si puedes soñarlo puedes hacerlo realidad! Eternamente agradecidos, todo fue de maravilla! Almudena, Javier y Cristina mil gracias de corazón por hacer de nuestra boda, el mejor día de nuestra vida

El mejor sitio para realizar una boda….
Una finca preciosa, de película, que junto con un equipo maravilloso dirigido por Almudena hicieron que nuestro sueño se hiciera realidad.
En todo momento muy atentos para todo lo que necesitábamos, sin ponernos ni una pega y facilitándonos todo al máximo. Sin duda, el mejor sitio que hemos podido elegir para celebrar un día tan especial.

Un lugar mágico donde tú boda se convierte en un sueño gracias a lo espectacular del escenario en general y la gran ayuda y colaboración de todo el personal.

Desde el primer día que vimos la finca y conocimos a Almudena sabíamos que nos casaríamos allí y ¡cómo acertamos! La finca es preciosa, está súper limpia y cuidada. Muchos de los invitados nos dijeron que no habían estado nunca en una finca de bodas tan espectacular. Todo salió a pedir de boca, el equipo estuvo súper pendiente y Almudena es encantadora. Recomendable al 100%.
Laura e Ignacio.

No tengo palabras para explicar la bella de este lugar. Todo está cuidado con mimo y hasta el último detalle es perfecto.

No puedo tener mejores palabras para Almudena y todo su equipo.

Celebrar nuestra boda en la antigua fábrica de harinas fue la mejor decisión que pudimos tomar. Todo salió perfecto, desde el minuto uno cuando fuimos a visitar la finca, meses antes, hasta el final de la celebración el día de la boda.
Habíamos ido a ver dos fincas más antes de visitar esta, y cuando mi pareja y yo la vimos, acompañados por Almudena, la encargada de organizar las celebraciones, supimos que iba a ser la nuestra. No quisimos ver ninguna más. El sitio es espectacular, no necesita adornos ni decoraciones, ya solo el entorno es… una pasada. A todos los invitados les dejó impresionados. Almudena desde el primer momento fue súper amable, siempre dispuesta a ayudar y a resolver dudas.
El día de la celebración estuvo muy pendiente de todos los detalles para que todo saliese bien, y la verdad es que fue perfecto. Muchas gracias a todos los que nos acompañaron ese día, Cristina, siempre sonriente y controlando que todos los detalles y sorpresas saliesen como habíamos organizado. Javier, siempre en el momento preciso para poner la música en cada situación, en la fiesta fue un dj brutal, nos encantó. Eli, menos mal que estaba para arreglar algunos pantalones rotos y otros descosidos… y Darek, que nos echó una mano para recoger nuestras cosas y llevarnos a la habitación.
Si estáis buscando una finca para celebrar vuestra boda, esta lo tiene todo.

No tengo palabras para describir lo vivido el día de mi boda... Ha sido la boda que siempre soñé. La finca es increíble, Almudena y su gente son un amor. Hacen que todo salga sobre ruedas y que no tengas que preocuparte por nada. Todo son facilidades, comodidades...
En fin... Enamorada de la finca, de Almudena, de Javier, de Leonor, de todos!!! No puedo dejar de darles las gracias!!!! Soy más feliz desde este día!! Y mi gente también!!!
La recomiendo un 200%

El pasado 12 de noviembre nos casamos en la Antigua Fábrica de Harinas, un sitio espectacular. Cada rincón parece sacado de un cuento. Todos los invitados nos comentaron que estaban alucinado con la finca. Es un lugar especial y no podríamos haber elegido mejor. Almudena nos los facilitó todo y no nos puso ninguna pega a nuestras peticiones. Totalmente recomendable.

El sitio es un sueño pero el personal una maravilla.
Gracias y gracias por todo, sois la caña!!

¡Fue un día increíble y que nunca olvidaremos! Tuvimos la boda en el lugar más bonito que podíamos imaginar. Muchas gracias a Almudena por todo, nos ayudó de principio a fin.

Como bien dice el título de esta opinión, me casé en el sitio de mis sueños. Es lo más bonito que he visto en cuanto a bodas y todo el mundo quedó impresionado, tanto, que estaban más ocupados haciéndose fotos en todos los rincones que con los novios, jaja.
Además la dueña, Almudena, lo hace todo tan fácil y es tan cariñosa que es como si fuese parte de tu familia. Por ello me casaría mil y una veces allí.

Desde que visitamos la finca, no podíamos dejar de imaginarnos recorriendo el paseo de los cipreses, así que supimos que teníamos que celebrar allí nuestra boda.
Es una finca preciosa, llena de color y de naturaleza. No te deja indifirente. Desde el momento en que cruzas sus puertas te sientes embelesado con el entorno.
Muchos de nuestros invitados nos comentaron que entre las flores, el color anaranjado de sus paredes y el caer del sol, hacía que las fotos tuvieran su propio filtro con el nivel perfecto de saturación, y no podemos estar más de acuerdo.
El personal de la finca es muy amable y servicial, y nos ayudó con todo lo que les propusimos.
Finca muy muy recomendable.