Empecé a navegar en esta comunidad en 2019, ¡qué tiempos aquellos covid-free times!
Pero los tiempos futuros siempre pueden ser mejores, pues están en nuestras manos, corazones y muy importante: ¡dedos de frente!
El pasado 25 de octubre del 2020 me casé en plena pandemia: SIN banquete y SIN brindis, SIN baile y SIN churros con chocolate en la madrugada, aunque también...
CON mi novio, nuestra familia, nuestros amigos y nuestro AMOR. Esto de "nuestro AMOR" suena muy peliculero rosa Disney (ALIAS MUY CUTRE Y CURSILÓN), pero es así.
bodas.net/cronicas-boda/josep-adriana--rw71195
Me he animado a compartir algunos de los trucos que nos ayudaron a llegar a muy buen puerto a pesar de las restricciones. Puede que me haya avanzado con este de "buen puerto", ya que no llevamos ni 1 mes casados, pero la idea es EMPEZAR, SEGUIR Y MANTENERSE CON OPTIMISMO.
¿Vas a casarte y este archienemigo SARS-COV-2 sigue en circulación?
1) Quien la sigue la consigue.
Si estáis decididos a casaros, ADELANTE.
Decidirse es el paso más importante para quitarse presión (ese "rum rum" en pecho, corazón y barriga).
Hacer un pacto de caballeros: vamos a ganar esta batalla SÍ o SÍ, aunque sea los 2 solos ante el altar (bueno, y con el cura), ¡amén Jesús, María y Josep!
2) Invitados - aforo.
Nuevos tiempos, nuevos formatos: las bodas y cualquier celebración de + de 200 invitados pasó a ser "anticuada". Debemos hacer un UPDATE.
Siempre se ha dicho que los amigos de verdad se pueden contar con los dedos de una sola mano. A veces, se puede añadir la otra, pero muy raramente 1 pie y prácticamente jamás, los 2 pies. Así pues, cread una lista de invitados más íntima, que no se vaya más allá de 120-140 estrellas/ángeles de la guarda.
* Si la situación epidémica requiere limitar el aforo, siempre será más fácil no olvidarse de ningún angelito.
* En caso de que las cosas se pongan feas, también será más fácil elegir el "comodín del corte amistoso".
* Este "comodín" a veces es de generación espontánea: "no vendremos, tenemos miedo" ( ya os dije que jamás se puede contar incluyendo los 2 pies, estos eran los de los pies, ¿a qué sí?).
Nosotros tuvimos que bajar de 110 invitados a 80 y posteriormente, 60...
¿Cómo dar el comunicado?
Aplicando el "comodín del corte amistoso" (tiene una sola excepción que conoceréis al finalizar el rollazo de la novia ahora mujer) y con sinceridad.
<<Pues bien tía Teresita, la situación se ha puesto "peliaguda". Jamás olvidaré tus años de ratoncito Pérez a mi lado, pero para preservar la seguridad de todos, en esta ocasión únicamente nos reuniremos 4 gatos y la pandilla de la universidad. Cuídate mucho porque próximamente tendrás que venir a casa, sí señor, a hacer de ratoncito Pérez de una nueva generación".>>
** Muchas personas os dirán que NO ("el comodín de generación espontánea").
** Otras os dirán que SÍ, aunque vosotros sufriréis por si están ("el no comodín").
¿Cómo actuar ante noticias/personas non gratas?
Con respeto y con AMOR (SÍ, de nuevo me salió la cursilería).
*** Aquellos que os dicen que no de forma "improcedente", patada en el culo con el pie. Total, ya estan allí, en la suela del dedo meñique del pie.
Ejemplos reales (no basado en hechos reales, sinó tal cual):
- En la misma mañana de bodas: "No vendremos porque he pensado y repensado y, como ya no daba para más, he pensado con mi marido y, como tampoco daba para más (por eso estáis casados...), pensamos en mis padres y finalmente, como esto es un riesgo, no vendremos". Al habla: una médica que realiza guardias en Urgencias, sabiendo que se trata de una boda que se ha quedado sin banquete y estaremos todos en una iglesia al 30% del aforo y bajo mascarilla, sí, es del equipo "pies". Formato: audio de Whatsapp...
- En las 24 h previas: "Hola pareja, que finalmente no vendremos porque como tenemos niñas pequeñas (y también abuelos, que las niñas están más con ellos que con vosotros) pensamos que es peligros". Al habla: el amigote "del pie" que el día de la boda cuelga fotos en Instagram en una comida con us amigotes de la otra pandilla... Formato: mensaje de Whatsapp...
- A meses de la gran fecha: "Hola pareja, solo quiero que sepáis que pase lo que pase estaré con vosotros. Ahora sí conocemos al cabroncete este y sabemos como mantenerlo a ralla: distancia, lavado de manos y saludo a la oriental". Al habla: testigo de nuestra boda y nuestro AMOR (¡SÍ! Soy una cursi, pero juro que me ha venido post-boda). Formato: llamada en tiempo real .
NO TENER a nadie del equipo pies en nuestra boda fue un regalo del cielo.
No siempre vienen pandemias para poder poner a las personas en el lugar que les corresponde . Así pues, dad gracias por tener esta super oportunidad.
3) Celebración: vamos a lo simple, ¿qué es una boda?
Pues para no inventar, vamos a la RAE: "ceremonia mediante la cual se unen en matrimonio dos personas, y fiesta con que se celebra".
Aquí no se menciona mi banquete, ni baile ni fondue de chocolate.
** Ceremonia = civil, religiosa...
La podéis hacer más o menos larga, más o menos chistosa, más o menos "cursi".
** 2 personas = los enamorados.
Juntos habéis elegido seguir adelante y aquí estáis los 2, vais a llorar de emoción fijo (si no es así déjalo en los comentarios porque eres una rara avis...).
** Fiesta = esto va desde dar una manzana Golden envuelta en papel pinocho para llevársela a casa tipo picnic, a una rave sonada hasta las 1001 de la madrugada.
¿Cómo organizar si no sabemos qué va a pasar?
Yo creo que jamás hemos sabido lo que pasaría...
- Si te iba a salir un grano cabroncete en la punta de la nariz el día elegido... ¡bendito acné!
- Si tu futuro marido iba a ir barbudo (pero muy, pero que muy sexy)...
- Si te ibas a rasgar la falda bailando o peor aún, ¡andando al lado de tu novio! Tantos paseos nocturnos para seguir pisándose, ¿no Josep?
Las bodas siempre han "florecido" en el misterio (y dale con flores y cursilerías, pero ya verás que post-boda os saldrá así). Así pues, en tiempos de COVID, se sigue en la "línea misteriosa exacerbada".
Nosotros planemos nuestra "boda" ideal y luego la adaptamos.
A) Nuestro ideal = iglesia, banquete (comida) y baile "cortito" al atardecer.
El punto fuerte --> detallitos para nuestros dedos de las manos, nuestro angelitos y estrellitas.
B) Nuestra reinvención (el "boda tunning") = iglesia sin banquete y sin baile.
El puntazo --> mimamos a los invitados como mimaremos a nuestros hijos.
Priorizamos la SEGURIDAD por encima de cualquier otra cursilería:
- TODOS BAJO MASCARILLA SIEMPRE, a excepción de los novios, que tenían una PCR negativa para SARS-COV-2 en las 48 horas previas al evento.
PD. El "siempre" únicamente se rompió en el momento "decid patata - ¡POTATOE!" de las fotos, eso sí, únicamente a petición de los invitados.
- Elección de una HADA MADRINA que se ocupó del lavado de manos de los invitados, así como de su asignación a espacios pre-seleccionados: angelitos de "riesgo" en oasis de cariño, familias y grupos convivientes en la misma ubicación, personas con inmunidad frente a la COVID fueron usadas como barrera .
- Marcamos los bancos con flores, nada de cruces ni cintas tipo "crimen de serie policíaca americana".
- Pusimos música, dedicamos palabras re-dulces, entregamos 1001 detalles hechos a mano y 1001 tarjetas con más palabras de cariño.
- Aprendimos a SONREÍR, ABRAZARNOS y BAILAR con la mirada (no hace falta ninguna práctica previa, se aprende en el acto).
¿Irse con el estómago vacío?
Nos anunciaron la prohibición del banquete a una semana de nuestra boda, pero seguimos adelante.
Porque la comida no llena los corazones, el amor SÍ (espero que como mínimo hayas derramado una lagrimita y sino es así, al menos aplaude y sonríe, porque es la pura realidad).
Entregamos manzanas Golden de nuestra tierra envueltas en papel pinocho de 1001 colores y confites de almendra y chocolate. Objetivo: mantener el gusanillo a ralla.
¿Cómo distribuir las mesas?
A ver novios, esto siempre ha sido MUY DIFICIL, con o sin COVID. Así que no sigáis leyendo pensando en que después de este rollazo os voy a revelar una solución milagrosa, pues no existe. Bueno, al menos yo no la sé, si alguien la tiene: ¡no es tiempo de ser tacaño! ¡COMPARTE!
Habíamos diseñado las mesas con SENTIDO COMÚN + directrices compartidas por los "expertos" en los medios:
** familias y grupos convivientes.
** "no-convivientes" < 6 personas.
** en las mesas más variopintas (personas "no círculo habitual"), siempre intentamos que hubiera alguien con inmunidad conocida.
** evitamos mezclar distintos grupos de edad / entornos (sanidad, educación...) en una misma mesa.
Para que fuera más divertido, recortamos los nombres de los invitados y cada noche había una propuesta distinta:
- Esta semana futuros novios en pandemia, haremos mesas de... ¡6!
- Y esta semana parejita, haremos mesas de ¡4!
Lo convertimos en un juego: le quitamos todo el hierro y le pusimos todo el azúcar que pudimos.
No sé si jamás llegaremos a usar estas directrices porque, ya casados, sentimos que celebramos nuestro AMOR (no es cursi, es realidad) PLENAMENTE.
Sí, fue completamente distinto a lo que había imaginado. Pero gracias a la diferencia, fue de lo más especial, de lo más único y de lo más excepcional.
Dicen que segundas partes nunca fueron buenas, así que creo que no habrá "celebración de bodas", sino de algo mejor: baby shower, bautizo... o... ¡NOS DIERON LA HIPOTECA! (eso sí merece celebración especial jaja).
4) Regalos y detallitos.
Si sois novios "coronados" (alias: "casados o futuros casados en pandemia") puede que hayáis vivido esta desagradable y abrumadora situación: recibir un ingreso desde muy generoso a muy cutre o no-ingreso en el banco y ¡PATAPIM PATAPAM!: no haber podido ofrecer el banquete o peor/mejor aún, no haber podido contar con esa persona en vuestra celebración.
Mi recomendación es que aquellas personas que se han estrechado el cinturón al máximo (y no tan máximo) para dejar reflejada en vuestra cuenta bancaria su cariño, deben estar presentes en el tipo de boda que eligaís - podaís celebrar ("boda tunning"). Pues, claramente son personas del grupo "manos".
ATENCIÓN: si no entran dentro del aforo aplicando "el comodín del corte amistoso", SIN DUDA hay que aplicar la excepción.
Antes y después de nuestra boda, quedamos con la intranquilidad de qué hacer con aquellos ingresos que claramente estaban destinados a un super-mega-banquete de bodas.
¿Devolverlo? ¿Decir que les hacemos un comodín para una paella dominguera? ¿Qué dinero? Ojos que no ven, dinero que me ingreso y destino a la hipoteca.
En nuestro caso aplicamos el siguiente razonamiento: Quién hace un regalo, lo hace de corazón. Si no es así, merece una patada x5 en el culo (ya sabéis como tratar a la gente del grpo pies). Así pues, aunque no pudieramos demostrar nuestro cariño con jamón 5 jotas y delicatessens inpronunciables, nos reinventamos:
*** con detallitos elaborados a mano (no os perdáis en making-off en las fotos).
*** con muñequitos de boda personalizados (eleboré un cuestionario via Google documents usando como excusa que una compañera hacía su tesis doctoral sobre la personalidad y los personajes favoritos de ciencia ficción para dar con los mejores: ¡picastéis").
*** con muchas flores, tarjetas y miradas.
Elaboramos detallitos para todos. Si os soy sincera, todavía tenemos un montón para entregar (el comedor está apelotonado de bolsas rosa pastel...).
A pesar de que su coste haya podido ser mayor que los regalos recibidos (de hecho, muchas personas NO nos hicieron regalo pensando en entregarlo en un "banquete futuro"), el CARIÑO, el AMOR y nuestra FELICIDAD no se mide en euros, sino en MOMENTOS.
Gracias mare, mama (segunda suegra), papes, Jaumes, tata, cunyades, Judith, padrina.
Gràcies Josep (marido).
Gracias a vosotros por leerme, por compartirme. Gracias por creer que con COVID SÍ se puede.
Ojalá te haya podido inspirar, calmar o iluminar.
Con cariño,
Una mujer felizmente casada en tiempos de COVID