La boda de Yessica y David en Valladolid, Valladolid

David entró a la iglesia con la banda sonora de Hachiko y yo entré con la de Crepúsculo, que quedó genial. Al ver como todos los familiares y amigos me miraban y soltaban lágrimas de emoción, sobre todo mi mejor amiga, que lloraba a moco tendido, mis hermanos, que no paraban de mirarme emocionados y orgullosos, mis nervios se cambiaron a una mezcla de emociones muy difíciles de explicar con palabras (aún se me saltan las lágrimas al recordarlo). Y por fin llego al altar del brazo de mi padre (no sé cuál de los dos estaría más emocionado) y veo a mi ya casi marido mirándome, ¡estaba guapísimo! muchísimo mejor de lo que me esperaba. Un traje oscuro, con corbata negra y un nudo acompañado de un anillo con piedras de Swarovski y los botones también, yo no sabía nada de su traje ni él de mi vestido, nos sorprendimos los dos.

Una vez en el altar, se acabaron mis nervios por completo. Ángel, el cura, que es un encanto, nada más entrar nos casó. Ya habíamos quedado que él diría toda la frase y nosotros solo el "sí, quiero" ¡pues nos la jugó! Nos da los anillos y le dice a David: "Hala, dile lo que quieras". Los dos nos quedamos en blanco, y ya me dijo: "Yessi, te hago entrega de este anillo en señal de mi amor por ti, porque te quiero" y yo llorando le dije lo mismo. Después ya hizo un par de lecturas, y nos mandó salir a los dos a su lado a cantar el Padre Nuestro. Paró la misa para saludar a mi sobrino y cuñada. Antes de finalizar, Sara, mi cuñada de 9 añitos, leyó unas frases, preparadas entre ella, mi suegra y una amiga. Rompimos a llorar toda la iglesia, fue precioso. Nos felicitó todo el mundo por la misa tan agradable y amena que Ángel había dado.

Al salir, un amigo ya había repartido el arroz que habíamos preparado de colores, 4 kilos, bueno, veíamos que no terminaban nunca de tirarnos arroz y ya vemos, que mis hermanos ¡habían llevado otros 5 kilos! y pétalos, menuda nos prepararon... Nosotros nos fuimos al jardín para el reportaje, en lo que los invitados subían en bus y en sus coches.

Sobre las 20.15 empezó el cóctel en el restaurante El Hueco. Entramos con "Hoy tengo ganas de ti" de Christina Aguilera y Alejandro Fernández. Había un cortador de jamón en directo y una chica preparando mojitos y caipiriñas, ¡los invitados estaban alucinando! Al ratito empezó el monólogo, dado por un amigo, Jesús, nadie esperaba todo aquello. Entre los chistes, jamón, canapés y bebidas, todos lo pasamos en grande.

A las 22.00 entran los invitados a cenar y nosotros nos hicimos un par de fotos más, mientras que ellos se sentaban. Entramos al salón con la canción de "Angels" de Robie Williams, justo en el estribillo.

Dimos unos detallitos: para los hermanos un cristal grabado dando las gracias por estar ese día con nosotros; a los padres un set de vino en un estuche; a las madres una rosa preservada; a nuestro sobrino, que llevó los anillos, el Hello Kitty vestido de novio y a mi cuñada, que llevó las arras, la Hello Kitty de novia. ¡No se lo esperaba ninguno!

Después, ya empezamos a cenar. De primero ensalada de langosta con langostinos y vinagreta de frutos rojos. De segundo rape empiñonado a la castellana con almejas. Un sorbete de mojito. El lechazo con ensalada. De postre, tarta Bienvenida de Maro Vallés, con helado de turrón, café y chupito.

En el postre, nos dieron un regalo, una fuente de barro, con 450€ en monedas de 0,5 y muuucha miel, jajaja, además ¡¡muy bien cerrada con celo!! Eso no nos lo esperábamos, pero nos reímos todos mucho.

El primer baile fue "Tiempo de vals" de Chayanne. Ya empezaron las cinco horas de barra libre, con la fondue de chocolate y recena a la mitad de la fiesta. El Dj nos puso "Magia negra" como penúltima canción (que me encanta) y un último vals sólo para nosotros.

Sobre las 7 nos dejó el autobús en varias paradas y a la cama, que estábamos con ganas de dormir.

Fue un día maravilloso, lleno de momentos preciosos, emotivos y sobre todo felices. Todo esto gracias a los familiares, amigos y a mi marido, que sin ellos, no hubiese sido posible.