La boda de Rafael y Beatriz en Tres Cantos, Madrid
Rústicas Verano Dorado 3 profesionales
R&B
19 Jul, 2014El día de nuestra boda
Amanecimos con los nervios a flor de piel. Bueno, ya se notaban desde hacía unos días. Somos cuatro mujeres en mi casa y mi padre, así que imaginar el caos: vestidos, complementos, peluquería maquillaje, lágrimas, etc… Mi padre ya no sabía dónde meterse. Él y mi hermana subieron a la finca a decorarla y poner todas las cosas que habíamos preparado: meseros, carteles, mesa de chuches, cestitas para los baños, alpargatas, etc… Todo hecho a mano por las dos familias así que tuvimos mucho trabajo meses antes. La boda que queríamos era tipo rustica, lavanda, todo de madera, campo y mi vestido también era tipo rustico. Mientras ellos decoraban, mi madre, mi hermana y yo fuimos a la peluquería a ponernos guapas. Cuando acabamos fuimos a casa a comer y la maquilladora nos fue pintando una a una y a mí la última. Nos dejó impresionantes. Mientras tanto, el fotógrafo iba haciendo fotos. Nos vestimos todos para hacernos las fotos. A escasos minutos de irse mis hermanas y mi madre a la iglesia, me dieron la sorpresa de que iba a ir a la iglesia en un coche antiguo: ¡¡un descapotable!! Ahí empecé a llorar, ya que hasta ahora estaba de una pieza porque lo tenía todo controlado.
Seguir leyendo »Cuando llegamos a la iglesia las damitas estaban esperándonos a mi padre y a mí para entrar y todos los invitados expectantes con sus cámaras en mano. Ir caminando hacia el altar y ver a tu novio esperando con una cara que irradiaba felicidad y nervios a la vez, no tiene precio. Es imposible contener las lágrimas. La ceremonia fue muy emotiva, el cura era mi tío y personalizo las palabras de la homilía. Todas las personas que leyeron y participaron en la ceremonia eran amigos y familia.
Una vez terminada la ceremonia firmaron los testigos, nos hicimos las fotos con ambas familias y salimos de la iglesia. Como mi marido es militar, sus compañeros estaban esperando formando un pasillo con los sables. Al salir nos llovió muchísimo arroz y pétalos. Fue emocionante y muy bonito. Empezamos a saludar a todo el mundo y hubo besos, abrazos y lágrimas de emoción. Después fuimos a hacernos las fotos a un parque que hay en Tres Cantos y la verdad que una maravilla, han quedado genial, muy campestres que era el estilo de la boda.
Llegamos a la finca en el coche que me regalaron mis padres y ahí foto tras foto con todos los invitados, agotamos la hora del coctel en un periquete. La cena fue estupenda, aunque nosotros apenas comimos por los nervios. Repartí mi ramo a 3 personas: mi hermana, mi cuñada y una amiga mía que se casa el año que viene. Fue emocionante, muchas lágrimas y aplausos.
El baile nos quedó muy bien, ya que llevábamos una semanita ensayando hora tras hora. Bailamos una canción de la banda sonora de Pearl Harbor, que aparte de que nos encanta la canción, él es militar y yo enfermera , así que nos va genial. Mis cuñados nos hicieron un fotocall que dio muchísimo juego y han salido unas fotos muy graciosas.
Ha sido el día más bonito de mi vida, me volvería a casar otra vez, lo repetiría mil veces. Y ahora, compartir la vida con la persona que quieres, es mágico.
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