La boda de Lolo y Fany en Alcorcón, Madrid

El día de nuestra boda

Pues la verdad que el día de la boda salió todo perfecto, aunque por la mañana estaba histérica luego ya cuando se iba acercando la hora me fui tranquilizando. En la iglesia fue todo muy bonito y gracioso ya que mi marido hizo una broma con los amigos y ganamos un dinerillo, cuando salimos nos fuimos hacer las fotos a la residencia de ancianos de Navalcarnero que la verdad que es un sitio precioso y ya en el banquete se terminó el día fenomenal, nos sorprendieron con fuegos artificiales luego estuvo lleno de muchas sorpresas y alegrías y nuestro gran baile final que hicimos un pequeño remix de algunas canciones y a la gente le encanto la verdad.

Yo la verdad que me lo pasé genial aunque si digo que por estar tan pendiente de que todo saliera bien parece que tengo pequeñas lagunitas y no me acuerdo de algunas cosas pero os doy un consejo no estéis pendiente de que este todo bien y disfrutar de ese maravilloso día que solo lo pasas una vez. Aquí añado unas fotos de lo que yo hice en mi boda. A nosotros y a los niños de arras les regalé una percha personalizada con su nombre para que colgaran el traje de la boda. También hice arroz de colores para el momento de la salida de la iglesia, y las fotos quedan chulísimas ver arroz de colorines. Mientras que nosotros nos hacíamos las fotos en el restaurante puse como un tipo confesionario y cada uno iba y decía lo que quería. Las mesas las señalamos con series infantiles y a la entrada del restaurante pusimos un cartón pluma con todas las series y las personas que se sentaban en ellas. Luego en las mesas gracias a Vanesaa una novia que lo hizo el día de su boda le pedí que me enviara el modelo de las mariposas como tarjeta de agradecimiento quedaron chulísimas decorando las copas. En cada mesa pusimos una cámara desechable para que hicieran las fotos que ellos quisieran la verdad que quedaron algunas muy chulas. También en cada mesa pusimos una cestita con sobres y en cada sobre con el nombre de la persona había una chapa personalizada para esa persona que gustó mucho y la verdad que acertamos bastante. A la hora de la barra libre puse un palomitero y chucherias que desaparecieron enseguida. En vez de poner un libro de firmas, puse un árbol de huella y todos ponían su huella con tempera y quedo chulísimo. Como mi ramo no lo podía tirar porque era un abanico compre uno de chucherias y lo lancé. Mi marido en vez de dar vino a los chicos, regaló una participación de bonoloto a cada uno.