La boda de Joanes y Jugatx en Hondarribia, Guipúzcoa

El día de nuestra boda

De película.

El día fue increíble, mágico.

Desde la mañana, despertarme en casa de mis padres, con mi hermana, mi prima, increíble. La tarea de ponerme el vestido, los zapatos, todo al detalle, que en la tienda parecía fácil...

La llegada a la iglesia fue espectacular, con los peques de la familia como pajes y mis dos ayudantas. ¡Mi padre, que éramos incapaces de soltarnos la mano desde que nos montamos en el coche en la puerta de casa, eso no tiene precio, y cuando estaba en la puerta de la iglesia, con todos los amigos, los familiares, la gente que nosotros habíamos decidido que estuvieran allí, qué sensación de felicidad!

Entrar en la iglesia con ese coro cantando "Alleluyah" y ver al que iba a ser mi marido, allí delante, tan guapo, tan radiante, tan él, que todo lo demás desapareció, éramos él y yo, y lo demás era amor, todo amor.

La ceremonia fue preciosa, con su "Aurresku" a la salida, de la mano de nuestros amigos más íntimos como buenos vascos que somos. Después un pequeño reportaje íntimo para poder por primera vez hablar con mi futuro marido y... ¡al restaurante!