La boda de Gerard y Berta en Masmolets, Tarragona

Eran tres cuartos de 6, subimos al coche y nos dirigimos hacia la Iglesia de Masmolets. Una vez llegados, me cogió el brazo de mi padre y me acompañó hasta el altar, donde me esperaba mi hombre, con la música del trío de cuerda Triple Bemol de fondo. Fue una ceremonia religiosa sin misa, breve, emotiva y sencilla.

Cuando salimos de la Iglesia, nos dirigimos hacia el restaurante Gancho de verano, que está en Masmolets mismo. Todo el mundo nos felicitó por la comida que nos prepararon y los detalles decorativos tan acuerdo con lo que habíamos pedido. Mientras nuestros invitados iban entrando en el patio del restaurante, nosotros aprovechamos para hacernos un par de fotos. Cuando entramos en el patio del restaurante, nuestro dj (Agencia Artística Loren) nos recibió con la canción "Burning love" de Elvis Presley, mientras nos sobrevolaba el dron de Vitott Productions.

Nuestro primer plato consistió en una serie de aperitivos variados de pie con música de los 70 y 80 de fondo. El segundo plato nos lo sirvieron en las mesas paradas que había en el patio principal del restaurante. Como sólo éramos 57 personas, el restaurante nos hizo el favor de dejar elegir entre un plato de pescado y uno de carne a nuestros invitados. Después llegó el pastel, un brownie excepcional con helado de vainilla acompañado con la canción "Still young" de los The Cat Empire. Más tarde se proyectó un fantástico montaje con fotografías y animación que habían preparado nuestros hermanos, fue muy emotivo. Más avanzada la noche Gerard y yo empezamos el baile con la canción "Cuenta conmigo" de Txarango, mientras flotábamos en una nube de humo que creó nuestro dj y, poco a poco, todo el mundo se fue añadiendo. Desgraciadamente es un día que pasa a velocidad de vértigo. Yo, si hubiera podido, me habría quedado viviendo eternamente en ese día, tal y como lo hace en Bill Murray en "El día de la marmota".