La boda de Fernando y Doriana en Santander, Cantabria
Vintage Primavera Morado 5 profesionales
El 23/05/2015 664 1 0
F&D
23 May, 2015
El día de nuestra boda
Nos casamos en el Palacio de la Magdalena y, aunque al principio todo parecía un poco gafado, al final todo salió muy bien y justo como lo quería.
Fue una boda sencilla y en familia, eso era lo que quería. Tuve muchísimo tiempo para organizarlo todo.
Empezamos con las alianzas, sabíamos que las queríamos muy tradicionales, y no fue nada difícil hacernos con ellas.
Luego, el vestido, tenía claro que lo quería corto y pedí cita en varios talleres; al final lo compré en Corinthia Novias. Fueron, desde el primer momento, unas chicas encantadoras, siempre con una sonrisa en la cara y dispuestas a despejar mis dudas y, sobre todo, mis nervios.
Luego me dediqué a pensar en las invitaciones, que para mí fue lo peor. Perdí la cuenta de cuántas pruebas de color y cambio de dirección tuve que hacerles, pero, al final, las amé. Las diseñó un buen amigo ilustrador junto con los menús.
El chico de protocolo del ayuntamiento (Luis) no dejaba de decirnos: "las bodas en el palacio van muy rápido, buscad cosas para hacerla más personal y que dure un poco más". Nos aconsejó lecturas, pero todos en casa somos muy vergonzosos, así que opté por la música y contraté por este medio a Teresa de TodoChelo. ¡Qué niña más encantadora! Le di la lista le las canciones que quería y en el momento que las quería, no me hizo falta más. Ella me mandó por vídeo una muestra de cómo sonaría la música el día de la boda, y fue genial, incluso mejor oírlos aquel día.
Seguir leyendo »La boda fue por la tarde – noche, y dimos la cena en el Balneario de la Concha. Al principio la queríamos hacer en el Club de Golf Mataleñas, pero cerraron y el dueño nos aconsejó que lo hiciéramos en el balneario. Al principio no estaba convencida, porque teníamos recuerdos muy lindos del club, pero no nos quedó más remedio. Debo decir que no nos arrepentimos. Nos atendieron como reyes, no nos faltó de nada. La comida está realmente deliciosa, todos los camareros fueron muy agradables. La música la pusieron a nuestro gusto. En fin, realmente lo máximo como profesionales
La decoración y todos los pequeños detalles los llevó a cabo Bodas de Quimera. Eva tuvo mucha paciencia, me escuchó en todo cuanto le pedí. La bombardeé con fotos de todo con lo que soñaba, y ella lo hizo posible.
La tarta la encargamos en La Tila, totalmente personalizada, y debo decir que será mi repostera oficial de por vida.
Las fotos las hicimos con los chicos de Okland Fotografía.
Otro que tuvo muchísima paciencia fue Ciriaco, no sé ni cuantas veces fui a la tienda para enseñarle un ramo distinto.
El día antes estaba de los nervios, realmente ni me reconocía. Me quedaban pequeños detalles que yo misma me había inventado a última hora y quería hacerlo todo.
Cuando llegó el gran día empezamos la mañana como siempre, pero yo estaba muy nerviosa. Me pasé toda la mañana en la peluquería de Elena Salmon, y me dejaron guapísima, pero estaba agobiada. Quería salir rápido de allí y estar con la familia, que varios vinieron de fuera solo para ese día.
Salí a las 14:00, y llegué a casa de mi madre hambrienta. Allí ya estaba todo preparado y, por fin, me tranquilicé.
Llegamos al palacio, pero el concejal no, así que nos tocó esperar 30 minutos a que llegara.
Cuando empezó la ceremonia todo fluyó, todo fue perfecto. La música, las flores, las fotos, la temperatura… Todo. Quisiera vivir ese día cada día, pero sin estrés y sin ninguna preocupación, solo disfrutar de todo el cariño que nos dieron la familia y amigos ese día.
Sencillamente, fue el día más especial y bonito que he vivido jamás.
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