La boda de David y Sheila en Llafranc, Girona
Al aire libre Verano Rosa 5 profesionales
D&S
02 Jun, 2018El día de nuestra boda
Suena el despertador... Nervios. Es hora de prepararse. Aún teníamos horas, pero yo sentía que ya íbamos tarde. Desayunamos y todo el mundo te pregunta: ¿estás nerviosa? Pues ahora que lo preguntas, ¡sí! ¡Subimos al Far con ganas de empezar el día y ya vemos a nuestras weddings encargándose de todo! Los camiones dejando las nuevas sillas (blancas de madera, preciosas). Nos tomamos un café mientras veo llegar a la peluquera y maquilladora... Mi abuela, suegra y madre también tenían tanda por lo que todavía no era mi turno. Empieza a llegar la familia a dejar las maletas al hotel. Mis nervios en aumento. David me abraza y se encarga de mantenerme tranquila, menos mal que está aquí, como siempre. Suena tonto, pero te pones realmente nervioso, él también lo estaba. Te preocupa que todo el mundo quede contento y todo salga a la perfección. A pesar de ser una simple fiesta y de tener a la gente cercana allí. Salimos al patio y nuestra wedding repasa el timming con el staff (López de Rojas, Fran deCatta y Jaume Xic). El patio está quedando precioso... Los pelos de punta. Las mesas ya tienen la decoración y se acerca el momento. Empieza a llegar más familia a la que no puedo atender. ¡David se encarga de todo! Me maquillan y me peinan mientras mis videógrafos me hacen bromas y me graban. Fran está allí inmortalizando el momento. Toca vestirse... Mi madre nerviosa, no puede atarme el vestido con las uñas. ¡Llega mi padre para salvar el momento y todo se arregla! Los invitados empiezan a llegar y se van sentando poco a poco... Se oye desde la habitación. Llega el momento, suena su canción, mi padre y yo nos damos la mano y lloramos. Y ahora sí, suena la mía. Con miedo a darme un real guantazo en las escaleras bajamos... Todo el mundo empieza a llorar, y por supuesto, yo también. David me mira emocionado y yo me derrito... Los discursos preciosos, emocionados y valorando cada palabra. Los votos, románticos y el resto sigue solo. El aperitivo buenísimo y el banquete muy divertido. Mis amigos nos preparan un baile y la gente muy amable con nosotros. Damos 2 'novios', eran unas coronas con sus nombres preciosas, talladas en madera. Una liga, cuadros de regalo a los padres con fotos de la preboda y el ramo a mi abuela. Lloramos las dos y nos abrazamos. Mis tíos nos preparan un video con fotos de cuando éramos pequeños y nuestros pequeños juega a bailar el 'swish swish'. Todos los niños encantados con su animadora Patri, que hace que los padres no tengan ni que preocuparse. El baile muy divertido con Jaume que nos disfraza a todos y bailamos canciones actuales y de todos los tiempos. El baile principal rodeado de nuestros invitados con bengalas. Precioso. Un día para recordar.
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