Contacté con Lara con tiempo suficiente antes de mi boda. Había visto algunos trabajos suyos y tenía claro que quería que ella fuera la que me maquillase el día de mi boda. Un acierto total. Desde el primer momento, con su entrevista, donde te hace preguntas y te escucha (pero creéde, realmente escucha lo que quieres), te da paz, confianza y tranquilidad. Después de la entrevista me hizo una prueba en la que me comentaba los pasos y ya fuimos haciendo algún que otro cambio. Para el gran día, le pedí si podía desplazarse al lugar donde tendría lugar la boda y maquillarme antes de ella (me casaba en una casa rural y me vestía allí). Fueron todo facilidades, ninguna traba a nada. Me maquilló muy rápido y muy bien. A medida que se acercaba el momento, yo me fui poniendo un poco más nerviosa. Ella debió notarlo, ya que comenzó a hablarme de varias cosas para así distraerme. Ese día hizo maquillajes a varias de mis invitadas. Cada una de ellas luego me habló maravillas de su trabajo. Para mí, cabe destacar lo de una invitada en especial. Me dijo que a ella no le gusta mucho el maquillaje ni mucha cantidad. Que cuando le pidió algo suave, que no se imaginó que realmente la fuera a escuchar de verdad.
Que cuando se vio en el espejo, que realmente se sorprendió de que alguien realmente la escuchara y de lo bien que la había dejado. Si necesitáis una maquilladora para el día de vuestra boda, de verdad que os la recomiendo. 100%. Es una chica encantadora, superatenta, que escucha lo que realmente quieres y trabaja con un resultado final a tu gusto. Si dudáis, os recomiendo que la llaméis y habléis con ella. Veréis que desde el primer momento os hace sentir supercómodas y os da una paz increíble, la cual es más que necesaria en esta camino de locura al altar.

Lara es muy profesional y es puro amor. Quedamos a tomar un café y me encantó, se preocupó en conocerme y entender mis gustos. La prueba fue genial, muy divertida y cómoda. El día B, fue muy puntual y el resultado fue espectacular, mejor de lo que imaginaba, nos maquillo a mí, a mí madre y hermana. Estuvo hasta que me fui a la iglesia, ayudando en todo, ramo, velo,...
Lara, un millón gracias por todo, sin palabras. Contaremos con ella siempre que podamos en próximas ocasiones y bodas familiares.