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Bodas

Japón, una luna de miel de contrastes

¿Un destino de ciudad o de naturaleza? ¿Playa o montaña? ¿Un lugar moderno o tradicional? ¡No tenéis por qué renunciar a nada durante el viaje más romántico de vuestras vidas! El país nipón lo tiene todo. Descubrid sus mil y un encantos.

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Durante los preparativos nupciales hay tareas que os resultarán menos gratas y otras que, sencillamente, os encantarán. Y, a buen seguro, entre estas últimas está la de escoger el destino para uno de los viajes más especiales de vuestra vida. Y aunque tenéis variadas opciones a vuestro alcance, hay una que os enamorará por sus infinitos contrastes, sus bellos paisajes y las posibilidades que contempla: ¡disfrutad de una luna de miel inolvidable en Japón! ¿Preparados para conocer todos los secretos que encierra?

Tradición y modernidad

En Japón podréis disfrutar de la visita a ciudades ultramodernas, de paisajes casi futuristas. Dos buenos ejemplos son Tokio y Osaka, megalópolis vibrantes y bulliciosas con numerosas posibilidades de ocio, entre las que se encuentran opciones gastronómicas y de vida nocturna realmente fascinantes. Asimismo, os soprenderán sus grandes avances tecnológicos en diferentes aspectosde la vida cotidiana. ¿Os imagináis que el servicio de un restaurante u hotel sean robots?

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No obstante, si lo que os apetece es vivir la tradición nipona en todo su esplendor, no dejéis de visitar Kioto, antigua capital imperial y centro cultural del país. Templos y santuarios, como el Kiyomizu-dera o Kinkaku-ji (Pabellón Dorado), os maravillarán a cada paso. ¿Queréis que la experiencia sea todavía más auténtica e inolvidable? No lo dudéis y acudid a un pintoresco ryokan –alojamiento tradicional japonés–, con camas tipo futón y preciosas habitaciones con suelos de tatami y puertas correderas. También es de obligada visita el bosque de bambú de Arashiyama, al oeste de la ciudad. Pasead por el pequeño sendero que lo atraviesa y disfrutad de un lugar lleno de encanto; un respiro de paz, tranquilidad y aire puro que os encantará.

Playa y montaña

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Del mismo modo que vuestra luna de miel puede ser cosmopolita y combinarse al mismo tiempo con lugares donde la historia ha dejado su impronta, también puede encerrar otros contrastes de igual belleza. Así, en Japón tanto podréis disfrutar de tranquilos días de playa y sol como pasear por sus montañas e, incluso, visitar paisajes nevados como en Tohoku y Hokkaido.

En Okinawa, por ejemplo, encontraréis playas vírgenes, coloridos arrecifes de coral y aguas de azul turquesa, ideales para practicar submarinismo o snorkel.

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Por su parte, la región nororiental de Tohoku alberga paisajes rurales vírgenes e infinitas cantidades de nieve durante el invierno, perfecta para practicar deportes de nieve en alguna de sus reputadas estaciones de esquí. ¿Más lugares para los amantes de la montaña durante vuestro viaje de novios en Japón? Sin duda, visitar Hokkaido, la segunda isla más grande del país. Las onduladas colinas de las plantaciones de lavanda y los Parques Naturales de la región son el perfecto telón de fondo para jornadas de senderismo, piragüismo, rafting… ¿Se puede pedir algo más?

Bullicio y relax

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¿Os atraen las ciudades que nunca duermen, en las que las calles siempre están animadas y a cualquier hora del día (¡y de la noche!) hay un bar, un restaurante o un puesto callejero dispuesto a serviros? En Tokio, capital del país, no os perdáis el cruce de peatones de Shibuya, por el que se calcula que pasan alrededor de un millón de personas a diario. ¡Im-pre-sio-nan-te! Otra de las experiencias vibrantes que os recomendamos es una sesión de karaoke –una forma de entretenimiento muy típica de Japón, país en el que hay más de 10 000 salas dedicadas a esta actividad– y, puesto que estáis de luna de miel, lo ideal es que seleccionéis preciosas canciones románticas.

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Y si tras unas trepidantes jornadas os apetece gozar de agradables momentos de paz y tranquilidad, nada mejor que disfrutar de un onsen (los baños termales japoneses). Os recomendamos dirigiros a Dorogawa Onsen (Nara) para disfrutar de un baño relajante y curativo en sus manantiales. Asimismo, no podéis dejar de acudir a Ginzan Onsen, considerado uno de los pueblos balnearios más bellos de Japón. Situado en la preciosa región de Tohoku, resulta especialmente romántico visitarlo en otoño e invierno. Y si además de relajar el cuerpo también queréis relajar la mente, informaos sobre los lugares donde practicar meditación zazen, como templos o parques al aire libre. ¡Está claro que este destino tiene de todo!

¿Os han gustado estas posibilidades? Pues son solo algunos de los innumerables atractivos que ofrece el país nipón para que podáis vivir un viaje de novios realmente auténtico y único. Os enamoraréis de sus paisajes, de su cultura, de su gastronomía, de sus gentes… ¡Vivid una experiencia irrepetible en Japón!