La boda de David y Laura en Madrid, Madrid
Al aire libre Verano Rosa 3 profesionales
D&L
22 Ago, 2014El día de nuestra boda
E se día pasé muchísimos nervios, porque además veníamos de casarnos por el ayuntamiento desde Toledo y fue un poco estresante, pero en cuanto llegué a la peluquería ya me relajé. Tenía todo bien preparado en casa de mis padres, y mis maquillajes ya que me maquille yo (dado que soy maquilladora y nos volvemos muy exigentes de lo que sabemos).
Una semana antes me lesioné un dedo del pie con lo que el zapato pues dolía un poquito. Al venir los fotógrafos que por cierto elegimos Unicolor, yo aún no me había puesto el vestido, y mira que tenía todo el tiempo controlado, pero entre unas cosas, imprevistos, etc, pues les hice esperar. Eso conllevó a que en las fotos de mi casa saliera sin el velo, se me olvidó por completo ahí colgadito en el salón, casi me voy sin él. Pero bueno, la verdad que nos reímos de esas anécdotas, porque luego queda en eso, anécdotas graciosas.
Según salí de la casa me pisé el vestido y me hice un roto, pero bueno, cosas que pasan, y ya como van transcurriendo imprevistos pues te pones más nerviosa. Mi hermano era el chófer y tenía que indicarle yo a la finca Fuentearcos, y me equivoqué de dirección. Nada, que llegué un poquito más tarde de la hora, pero al ser la novia se me perdona, ¿no? El sitio donde lo hicimos nos encantó, así como para poner un pero yo diría que la alfombra que ponen para ir al "altar" es un poco inestable, porque encima del césped, tú con taconazos y el vestido, es toda una aventura. Pero llegué y pude subir los escalones. Aun teniendo la alfombra bien estiradita, que no hacia forma, mi padre tropezó eso sí. Nos casó Raúl, oficiante de ceremonia y protocolo, muy majo y después de la ceremonia, en el cóctel fue un poco estresante con las fotos. Me hubiera gustado tener más fotos robadas e ir acercándonos nosotros a la gente que estaba disfrutando que no ir llamando a las personas para que posaran en el mismo sitio, eso no me gustó la verdad. No nos dejó disfrutar.
Seguir leyendo »Las prisas de que hay que entrar a cenar, las prisas de que hay que terminar de cenar para salir al baile. Ese día si estás pensando en que tienes que ir a toda pastilla es un horror, porque la gente te saluda, te habla, y tú vas estresada, con el maître detrás que hay que aligerar. Antes de salir al baile tropecé y me caí, pero bueno, me reí un ratito, porque si no te ríes de esas cosas. Y luego ya lo demás fue disfrutar, disfrutar y disfrutar.
A pesar de mi opinión en algunos detalles también decir que las fotos quedaron preciosas, la postboda fue maravillosa y disfrute más de la cámara que ese día, y el restaurante la comida y servicio fetén. La gente quedó contenta con el lugar tan bonito y la comida exquisita. Cuando más a gusto estaba ya teníamos que irnos y acabó la música con lo que empezamos a cantar nosotros hasta que ya no pudimos alargarlo más porque te da pena terminar ese día.
Otra cosa a destacar es el Apartahotel Encasa que escogimos para la noche de bodas recomendado por Fuentearcos. Lo elegimos porque estaba bien de precio y se situaba a 500 metros, pero al llegar se equivocaron de habitaciones, el champan y bombones que nos iban a poner no estuvieron y nuestra sorpresa fue que la habitación daba justo encima de las vías del tren. Sí, surrealista. ¡Menuda nochecita! Así fue nuestro gran día, maravilloso con todo lo bueno y lo malo.
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