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Bodas

La habitación de la noche de bodas

La noche de bodas será, sin duda, una de las más especiales de vuestra vida, pues será la primera que viváis como marido y mujer. Si queréis que esa noche sea aún más especial tomad buena nota de nuestros consejos.

Los nervios de los preparativos, la ceremonia, el banquete, el baile y después… por fin podréis disfrutar el uno del otro a solas en vuestra primera noche como marido y mujer. Sin duda se trata de una noche muy especial para vosotros y eso merece que la habitación de vuestra noche de bodas sea también muy especial. Por eso hoy os traemos algunas ideas y consejos para que vuestra primera noche de casados sea inolvidable.

  • Si queréis que el romanticismo dure todo el día, podéis pedir a alguien de confianza que os decore la habitación en la que pasaréis vuestra primera noche de casados. Si no os fiáis de vuestros amigos y familiares y vais a pasar la noche en un hotel, podéis pedirles que os decoren la habitación para la ocasión. En caso de que la primera noche de casados la paséis ya en vuestro piso podéis contratar los servicios de alguna empresa para que se encarguen de ello.
  • Un camino de pétalos de rosa que os lleve desde la puerta de la habitación hasta la cama, un montón de velas encendidas, una botella de cava muy fría y una bandeja con fresas bañadas en chocolate, aportarán ese toque de romanticismo que estáis buscando para vuestra noche de bodas.
  • Si os casáis en un hotel, y vais a pasar la noche en una de sus suites, guardad a buen recaudo la llave de vuestra habitación, pues seguro que vuestros familiares y amigos estarán deseando hacerse con ella para prepararos algunas bromas, no siempre de buen gusto. Si no queréis sorpresas lo mejor es que dejéis las llaves de la habitación en recepción y que indiquéis claramente que no se la den a nadie más que a vosotros.
  • Si vais a pasar la primera noche en vuestra casa, y vuestros padres tienen copia de las llaves, es posible que se alíen con vuestros hermanos, primos y amigos y se las presten. En ese caso tenéis dos opciones, esperar cualquier cosa, y tomarse las trastadas con buen humor, o dejarles claro antes de la boda que no queréis tener ninguna sorpresa esa noche.